tag:blogger.com,1999:blog-18570689827622820282024-03-18T17:07:23.613+01:00ATURDIDO Y CONFUSOOtro tedioso blog sobre tecnología, sociedad y economía entre un mundo que muere y otro mundo que bostezaPablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.comBlogger372125tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-49446929416232091772024-03-12T09:47:00.000+01:002024-03-12T09:47:29.561+01:00¿Llega un nuevo invierno de la inteligencia artificial?<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj2a2QJEmgNMSSDMfPCsBKoWs2vtmGe42ajgWVcijDCmjH66n2sa8jD_yChylV1ZVU-YEWZWHHMxGmXHBafZMcwtX34og5oFAQtknTW2uj1qLYOeV23Q4jmSp6BJjmrTHxwog2VYn2vCP6x7hgxGc0pi3WRHS3-Gsw26iqE4Kaet_tq7yyTi8ccd-ySJ8Wf/s1024/SDC12707.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="768" data-original-width="1024" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj2a2QJEmgNMSSDMfPCsBKoWs2vtmGe42ajgWVcijDCmjH66n2sa8jD_yChylV1ZVU-YEWZWHHMxGmXHBafZMcwtX34og5oFAQtknTW2uj1qLYOeV23Q4jmSp6BJjmrTHxwog2VYn2vCP6x7hgxGc0pi3WRHS3-Gsw26iqE4Kaet_tq7yyTi8ccd-ySJ8Wf/s320/SDC12707.JPG" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="es" style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;">La inteligencia artificial
ha pasado de ser una tecnología de moda a convertirse en el centro de atención
mediática por su capacidad para generar sorpresa. La velocidad a la que se han
ido sucediendo los avances en este terreno en poco tiempo y los impactantes
resultados obtenidos generan tanta expectación como preocupación, tanto por su
poder disruptivo en la mayoría de las actividades económicas, como por los
posibles efectos negativos que puede tener su mal uso. La popularidad adquirida
en los últimos dos años por los modelos amplios de lenguaje (<i style="mso-bidi-font-style: normal;">large language models</i>), como ChatGPT de
OpenAI o Gemini de Google, ha puesto en manos de cualquiera la posibilidad de
crear contenido (texto, imagen o vídeo) con estas potentes herramientas, sin
necesidad de poseer conocimientos técnicos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">Todo parece indicar que
estamos ante una revolución tecnológica sin precedentes. El propio Bill Gates,
fundador de Microsoft y uno de los grandes gurús de la era digital, comparaba </span><a href="https://www.gatesnotes.com/The-Age-of-AI-Has-Begun" style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;"><span style="color: #1155cc;">hace unos días</span></a><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;"> el desarrollo de la
inteligencia artificial con hitos fundamentales de la historia de la
innovación, como la creación del microprocesador, el ordenador personal,
internet y el teléfono móvil. Todos ellos transformaron los cimientos de las
vidas de las personas, contribuyendo a cambiar la economía y la sociedad, y
todo parece indicar que la línea principal de investigación en inteligencia
artificial -basada en el aprendizaje automático y las redes neuronales- va a
producir un terremoto similar al que trajeron consigo esos avances.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">A pesar del convencimiento
generalizado sobre el descomunal potencial de crecimiento a medio plazo de
estas tecnologías, hay voces que predicen que, por el contrario, esta época
dorada iniciada hace poco más de un decenio podría estar tocando techo, de manera
que entraríamos en otro “invierno de la inteligencia artificial”, como los que
tuvieron lugar en el pasado.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">No nos engañemos, aunque
solamente llevamos oyendo hablar de máquinas que ganan a campeones de ajedrez,
chatbots, vehículos autónomos y asistentes personales desde mediados de la
pasada década, estamos ante una disciplina cuyos orígenes teóricos se remontan
a la década de los años cincuenta del siglo XX, con los trabajos de Alan
Turing, John McCarthy, Marvin Misky y Claude Shannon, entre muchos otros. La
historia de la inteligencia artificial ha experimentado crisis cíclicas, en las
que ha cundido el desánimo por el fracaso de los avances o el incumplimiento de
las expectativas depositadas, y la financiación de la investigación se ha visto
frenada ante las dificultades para rentabilizar las cuantiosas inversiones
realizadas. Es lo que ha venido a denominarse “inviernos de la inteligencia
artificial”, momentos de parón en la investigación y desarrollo, como los que
tuvieron lugar entre 1974 y 1980, o el iniciado a principios de la década de
los 90.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">¿Cuáles son las
principales limitaciones y obstáculos que puede encontrar actualmente el
desarrollo de la inteligencia artificial? En el caso general del aprendizaje
automático y el aprendizaje profundo, que son las ramas de la inteligencia
artificial en los que está basado el </span><i style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">boom</i><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">
de los últimos años, el principal problema es que están basadas en el</span><i style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;"> big data, </i><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">es decir, se trata de
algoritmos devoradores de datos, que utilizan para generar patrones, pero, ante
situaciones donde los datos no están disponibles o resultan difíciles de
conseguir en grandes cantidades, el aprendizaje profundo puede no resultar la
mejor solución. Por otro lado, el uso de estos sistemas puede atentar contra
los derechos individuales de las personas, en términos de privacidad e intimidad.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">Además, en el estado
actual de desarrollo, esta tecnología no es capaz de distinguir claramente
causalidad y correlación. Puede identificar que existe una relación entre el
suceso A y el B, pero no suele poder establecer si hay una relación causal
entre ambos. Una de las principales críticas que reciben estos sistemas es que
no entienden el mundo que les rodea, como </span><a href="https://elpais.com/tecnologia/2024-02-24/nazis-chinas-y-vikingos-negros-google-suspende-su-ia-de-imagenes-por-sobrerrepresentar-a-minorias.html" style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;"><span style="color: #1155cc;">ha demostrado hace poco la herramienta Gemini de Google</span></a><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">
que, al pedírsele que generara imágenes de soldados alemanes de 1943, ofreció
un catálogo compuesto por mujeres asiáticas y hombres negros, se conoce que en
un intento de garantizar un equilibrio étnico dentro de las fuerzas de Tercer
Reich. Algo parecido le ocurrió al crear imágenes de vikingos del siglo XII.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">Algunos expertos
consideran que el aprendizaje automático debería ser combinado con otras
técnicas de la inteligencia artificial para poder seguir avanzando
satisfactoriamente.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">En el caso concreto de la
inteligencia artificial generativa, es decir, la que se utiliza para crear
contenidos como textos, imágenes, vídeos o líneas de código de programación, a
las limitaciones anteriores se suman otras de distinto índole. Por una parte,
el propio funcionamiento de los algoritmos con frecuencia ofrece malos
resultados, lo que se denomina “alucinaciones”, como lo que hemos visto de
Gemini un poco más arriba, lo que pone en cuestión su fiabilidad. Por otra, no
existe un modelo sólido de negocio en empresas como OpenAI y, teniendo en
cuenta lo costoso que supone desarrollar y mantener sistemas como ChatGPT-4, la
falta de recursos financieros se puede convertir en un cuello de botella para
seguir adelante.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">A lo anterior hay que
sumarle que los modelos amplios de lenguaje se nutren mayormente de información
y contenidos procedentes de internet para realizar sus creaciones, contenidos
que en su gran mayoría están sujetos a derechos de autor. El director de Open
AI, Sam Altman, llegó a </span><a href="https://www.elperiodico.com/es/tecnologia/20240111/chatgpt-reconoce-imposible-entrenar-inteligencia-artificial-derechos-autor-sam-altman-copyright-96788153" style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;"><span style="color: #1155cc;">afirmar en enero</span></a><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;"> que sería imposible entrenar
a los modelos actuales de inteligencia artificial sin violar los derechos de
autor, pero ¿serían rentables sus aplicaciones si tuviese que pagar por
ellos?</span><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">Una última cuestión es la
relativa al impacto ambiental de los sistemas de inteligencia artificial, cuya
huella de carbono derivada de las emisiones de gases efecto invernadero por la
cantidad de energía que demandan es creciente, a medida que se hacen más
complejos y sofisticados. </span><a href="https://www.technologyreview.com/2019/06/06/239031/training-a-single-ai-model-can-emit-as-much-carbon-as-five-cars-in-their-lifetimes/" style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;"><span style="color: #1155cc;">Se ha llegado a calcular </span></a><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">que entrenar a un
solo modelo de inteligencia artificial produce una huella de carbono superior a
las de cinco automóviles durante toda su vida útil.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: Georgia, serif; font-size: 13pt;">¿Estaremos ante un nuevo
invierno de la inteligencia artificial? Por si acaso, vayan cogiendo ropa de
abrigo.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="es" style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="es" style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="es" style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="es" style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="es" style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;"><o:p> </o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-14967029614733659092024-02-27T12:04:00.001+01:002024-02-27T12:04:40.369+01:00La inteligencia artificial revoluciona las búsquedas en internet<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjxJap7eDS9EWPnBux0baisDL4QWMu9VXcuumAv4_LsT81lADzWKIY6DWDOZRpaVH-UAjnxkQo2-1KpFOXLIYQIJNdekDBfiHA0GKj9SPFVeXsTZ7xnRjj0jUu4RrcLWP-yPy9p4eWjvF2Yg_BlKWIH7Rr-zy8qch7wnhXFDX9_0yJntoTRdjYkqPauHVuF/s240/4197333321_0b0b14f980_m.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="183" data-original-width="240" height="183" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjxJap7eDS9EWPnBux0baisDL4QWMu9VXcuumAv4_LsT81lADzWKIY6DWDOZRpaVH-UAjnxkQo2-1KpFOXLIYQIJNdekDBfiHA0GKj9SPFVeXsTZ7xnRjj0jUu4RrcLWP-yPy9p4eWjvF2Yg_BlKWIH7Rr-zy8qch7wnhXFDX9_0yJntoTRdjYkqPauHVuF/s1600/4197333321_0b0b14f980_m.jpg" width="240" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La inteligencia artificial
generativa no deja de producir titulares en su breve vida mediática. Desde que
hace poco más de un año se convirtió en la tecnología de moda gracias a la
herramienta ChatGPT, su capacidad para erigirse en amenaza para actividades
económicas y competencias profesionales no ha dejado de crecer. El potencial
transformador que presenta reside en su habilidad para generar contenidos
-texto, imagen, vídeo o código de programación- utilizando para ello grandes
cantidades de datos, generalmente procedentes de internet. Precisamente, una de
sus aplicaciones más novedosas está asociada a uno de los servicios más populares
y utilizados de la web: los buscadores.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En mayo de 2023, Google presentó
un nuevo paradigma de búsqueda en las redes, que ha bautizado como <i>Search
Generative Experiences (SGE)</i>. Básicamente, se trata de un motor de búsqueda
que, basado en la inteligencia artificial, ofrece respuestas directas y
redactadas a las consultas realizadas, en vez de solamente la tradicional lista
de enlaces web. En la práctica la herramienta recoge información de fuentes
diversas y las incorpora en una única respuesta que aparece en la parte
superior de la página. En la parte de debajo de la página seguirán apareciendo
los resultados de forma similar a los que ahora ofrece Google Search.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">No obstante, antes de la de
Google, la primera experiencia en este sentido la llevó a cabo Microsoft,
cuando integró en su buscador Bing noticias en tiempo real gracias a la
colaboración de la empresa OpenAI, la creadora de ChatGPT. El modelo utilizado
se nutría de contenido procedente de toda la red de redes. Posteriormente, la
compañía fundada por Bill Gates ha rebautizado su producto como Microsoft
Copilot y lo anunció en el blog corporativo en noviembre del pasado año.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El caso de Google es similar. Su
servicio Gemini está construido sobre modelos amplios de lenguaje (<i>large
language models</i>) entrenados con contenidos de internet y de otras fuentes,
que trabajan con texto, imágenes, audio y vídeo. La versión experimental de
esta herramienta ya está disponible en más de cien países. En esta primera
versión del buscador todavía se muestran los enlaces web que le han servido al
sistema para elaborar la respuesta a la consulta realizada.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Estos novedosos sistemas de
búsqueda siguen una filosofía denominada <i>Retrieval-augmented generation
(RAG</i>), una infraestructura de inteligencia artificial destinada a mejorar
la calidad de las respuestas generadas por los modelos amplios de lenguaje
(LLM), complementando la representación interna de la información que producen
con fuentes externas de conocimiento. Esta técnica permite, por una parte, que
el modelo tenga acceso a los datos más fiables y actualizados, y, por otra, que
el usuario disponga de la referencia de las fuentes de información usadas por
el modelo para poder comprobar su relevancia y precisión. De acuerdo con los
expertos, el enfoque RAG limita la probabilidad de que la inteligencia
artificial generativa ofrezca información incorrecta o que “alucine”, como se
dice en el argot del sector cuando genera resultados inventados. También reduce
la necesidad de tener que entrenar constantemente el modelo con datos nuevos,
con el consecuente ahorro de costes que ello implica.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Como parece evidente a simple
vista, este nuevo enfoque en los buscadores provocará grandes cambios en el
marketing digital y la publicidad, tal y como los hemos conocido hasta ahora.
Las marcas deberán conocer a fondo el funcionamiento de los sistemas SGE para
dar con la forma óptima de posicionar sus mensajes en las redes. En este
sentido, cobra especial relevancia el diversificar el contenido que se vuelca
en internet, combinando con el texto distintos formatos, como imágenes,
infografías o vídeos, pues ello contribuye a que aparezca entre los resultados
de búsqueda. Esto conlleva que se intensificará la competencia entre las
empresas por renovar y mejorar su contenido en el ciberespacio. El material
utilizado debe estar debidamente adaptado para la inteligencia artificial
generativa, es decir, debe poder ser interpretable por estos modelos, primando
la claridad, la información relevante y el uso estratégico de palabras clave.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-40608270474647434192024-02-13T11:06:00.001+01:002024-02-13T11:06:32.745+01:00La tecnología digital ha cambiado la educación, pero no la ha transformado<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDMj9MTnanqXCt4zg2BBiChItIQ-g9kiGvvWmuL17L4amQe9G94tS6FnDLLwZ2SADmzRoMX4gPIchuiQDltBxWttM94yoxr8jVoVqYpk4MQfg4-mpDXvKPfkS2RtcNrareiIShW5QF_gx8cSpyUmrpDjqbACzaiVwwax9_CrxP8Xc_Med0nljRPOx4zpds/s710/ScannedImage.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="710" data-original-width="623" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDMj9MTnanqXCt4zg2BBiChItIQ-g9kiGvvWmuL17L4amQe9G94tS6FnDLLwZ2SADmzRoMX4gPIchuiQDltBxWttM94yoxr8jVoVqYpk4MQfg4-mpDXvKPfkS2RtcNrareiIShW5QF_gx8cSpyUmrpDjqbACzaiVwwax9_CrxP8Xc_Med0nljRPOx4zpds/s320/ScannedImage.jpg" width="281" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El uso de la tecnología digital
en la educación tiene una tradición que se remonta al comienzo del presente
siglo; al principio a través de las aulas específicas para impartir
conocimientos de informática, y, más adelante, mediante la introducción de dispositivos
y programas como soporte instrumental para la enseñanza de las materias
curriculares. De esta manera, ya es algo corriente ver en una clase cualquiera
la utilización de pizarras electrónicas, proyectores y ordenadores. No
obstante, entre la línea de pensamiento pedagógico más tecnófilo siempre se ha
considerado que la digitalización de la enseñanza se produce a un ritmo muy
inferior al que lo hace la sociedad. Se argumenta que los estudiantes,
habitantes ya de un mundo completamente digital, se enfrentan en el aula a
métodos de aprendizaje heredados de otras épocas, y se subraya la necesidad de
adecuar la enseñanza a las necesidades de la ciudadanía del siglo XXI.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">A menudo se ha dado por supuesto
que usar tecnología en el aula solamente trae consigo ventajas, sin embargo,
cada vez se alzan más voces que ponen en cuestión este axioma. A mediados del
pasado año, el Gobierno de Suecia anunció la paralización del avance de su plan
de digitalización en centros educativos para volver a fomentar el uso de los
libros de texto. Esta decisión vino motivada porque el Estudio Internacional
para el Progreso de la Comprensión Lectora (PIRLS) referido a 2021 detectó un
descenso del nivel del alumnado del país en este campo, de forma que las
autoridades educativas quieren centrar sus esfuerzos en habilidades básicas
como leer, escribir y contar, todo ello apoyado por medios tradicionales.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La Unesco ha reflexionado en su
informe GEM (<i>Global Education Monitoring</i>) de 2023 sobre las ventajas y
desventajas de utilizar la tecnología en la educación, estableciendo una
postura fuertemente crítica al respecto. Bajo el título <i>Tecnología en
la educación: ¿una herramienta en términos de quién?</i>, el trabajo subraya la
necesidad de aprender a vivir tanto con tecnología como sin ella (es decir,
reducir su dependencia), que los jóvenes desarrollen la capacidad para
identificar la realmente necesaria entre la avalancha de información que les
rodea, y que la tecnología debe apoyar, pero nunca suplantar la relación
humana. De cara a mejorar la educación, la digitalización tiene que ser un
complemento de la interacción cara a cara con el docente, jamás un sustituto.
La tecnología se nos vende como un vehículo para el aprendizaje personalizado,
y, con frecuencia, esta promesa nos hace olvidar que el corazón de la educación
reposa sobre unas dimensiones sociales y humanas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La Unesco se muestra escéptica
sobre el valor que supuestamente añade la digitalización a los procesos
educativos, destacando que no existe una evidencia robusta al respecto. Por una
parte, la innovación se produce a tal velocidad que es muy difícil medir sus
efectos. Como ejemplo de ello, los productos de tecnología educativa cambian de
media cada 36 meses. Por otro lado, una parte importante de los estudios que
defienden el impacto positivo están realizados o financiados, directa o
indirectamente, por las empresas que comercializan los productos y servicios,
en un intento de refutar análisis procedentes de entidades independientes que
niegan dicho impacto.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Con todo, el estudio admite que
la tecnología educativa puede aportar mejoras a determinados tipos de aprendizaje
en algunos contextos. Una ventaja evidente es que ha facilitado el acceso a
cantidades ingentes de recursos educativos <i>online</i>. En cualquier
caso, su introducción debe dirigirse a la consecución de objetivos de
aprendizaje, y tiene que estar integrada en la orientación pedagógica aplicada
en cada momento. Igualmente, la Unesco señala que un uso excesivo o inapropiado
de dispositivos y servicios digitales puede tener un efecto negativo en los
rendimientos del estudiante, y pone de ejemplo los resultados del informe PISA,
que refleja que en catorce países de los analizados se detectó una relación
negativa entre la proximidad de los teléfonos móviles y el aprendizaje del
alumnado. El debate sobre si los móviles deben estar en el aula o prohibidos en
ella es especialmente intenso en España en estos momentos, con comunidades
autónomas a favor de una u otra postura.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Otro aspecto interesante que
destaca este trabajo es que la velocidad de la innovación tecnológica dificulta
la adaptación de los sistemas educativos a la digitalización. Poco a poco los
países van definiendo los estándares de habilidades digitales que van a
necesitar dominar los estudiantes para vivir y trabajar en un mundo conectado,
si bien muchos alumnos no tienen la oportunidad de practicar con herramientas
digitales en los centros escolares: de acuerdo con las cifras que aporta el
estudio, solamente en torno al 10% de los estudiantes de 15 años utiliza
dispositivos digitales más de una hora a la semana en las asignaturas de
matemáticas y ciencias. Asimismo, los docentes en general se sienten poco
preparados para impartir clases con tecnología, y la evidencia es que
únicamente la mitad de los países analizados tienen definidos estándares
relacionados con las habilidades TIC requeridas para los profesores.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Como conclusión, la pregunta que
surge es si la tecnología puede resolver los mayores retos de la educación.
Para la Unesco, estos desafíos son tres: la equidad y la inclusión, la calidad
y la eficiencia. En el primer caso, es cierto que la digitalización reduce las
barreras de acceso a la educación para grupos desfavorecidos de población, pero
sigue existiendo una importante brecha digital en la conectividad a internet y
en el uso de dispositivos. En relación con la calidad educativa, el informe
reconoce que la tecnología digital estimula el compromiso del estudiante con el
proceso de aprendizaje y favorece el trabajo colaborativo e interconectado,
aunque una aproximación educativa individualizada reduce las oportunidades del
alumnado de aprender en entornos de la vida real, y tiene un impacto negativo
en su privacidad y bienestar. Finalmente, el análisis realizado concede que, en
términos de eficiencia, la tecnología digital permite disminuir el tiempo que
docentes y alumnos dedican a tareas rutinarias de poco valor añadido, cuyo
ahorro puede ser destinado a actividades con un mayor sentido educativo. Para
resumir todas las reflexiones en una sola frase: la tecnología digital ha
cambiado la educación, pero no la ha transformado.<o:p></o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-9943942200173044472024-01-29T11:02:00.000+01:002024-01-29T11:02:00.009+01:00La inteligencia artificial transforma el mercado de trabajo<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg_0RqXMcwnTzBGelCJO6x_iSTMOfdZ63iJFWnIkBtF1dsC1YyWbv3oF9BfwTkB3ycxRYZELmwck98f6hy15kxrSJ4Bus5nwSchifIZCWHsOtr1XSFF_oYu7iOXF3lpvGIc1diDglqoM0ohnEf1C19FWyNAWL9lppGluoHzz02D4jBJbdl9zmxHWMYxC9a1/s500/SDC13056.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="444" data-original-width="500" height="284" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg_0RqXMcwnTzBGelCJO6x_iSTMOfdZ63iJFWnIkBtF1dsC1YyWbv3oF9BfwTkB3ycxRYZELmwck98f6hy15kxrSJ4Bus5nwSchifIZCWHsOtr1XSFF_oYu7iOXF3lpvGIc1diDglqoM0ohnEf1C19FWyNAWL9lppGluoHzz02D4jBJbdl9zmxHWMYxC9a1/s320/SDC13056.JPG" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La rápida evolución de la
inteligencia artificial durante la pasada década ha hecho saltar todas las
alarmas en relación con sus posibles efectos sobre el empleo. A medida que las
máquinas adquieren más habilidades, más peligro se percibe de que puedan llegar
a sustituir a los humanos. No obstante, el futuro del trabajo depende de un
complejo esquema de relaciones entre los sistemas inteligentes y los humanos
que no implica necesariamente la sustitución de los segundos por los primeros.
A menudo se vuelve la vista atrás para analizar qué pasó con el trabajo en las
grandes transformaciones tecnológicas del pasado, y la conclusión es que
acabaron por crear mucho más empleo del que destruyeron. Pero para algunos esta
vez no será así.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Para Goldman Sachs, la
inteligencia artificial generativa puede elevar un 7% el PIB global, aunque
también apunta que va a producir impactos significativos en los mercados de
trabajo, de forma que la automatización de tareas podría afectar a un total de
300 millones de empleos a tiempo completo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Un informe sobre el futuro del
trabajo publicado en mayo por el Foro Económico Mundial identificaba como
tendencia la transformación de los modelos de negocio empresariales a raíz de
la digitalización: más del 85% de las empresas encuestadas en el trabajo
reconocen que sus procesos se van a ver afectados por la adopción de
tecnologías de vanguardia. Alrededor del 75% de las compañías prevé
adoptar <i>big data</i>, inteligencia artificial y <i>cloud computing</i>.
<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Con todo, este estudio se muestra
en principio optimista sobre el mercado de trabajo. De acuerdo con su
predicción, la aplicación de la mayoría de las tecnologías traerá consigo
creación de empleo en los próximos cinco años, e identifica los mayores
yacimientos en profesiones relacionadas con la analítica de<i> big data</i>,
la gestión medioambiental y del cambio climático, y la encriptación y la
ciberseguridad. Por el contrario, este análisis también prevé destrucción de
empleo causado por las tecnologías agrícolas, las plataformas digitales y <i>apps</i>,
el comercio electrónico y la inteligencia artificial. El saldo neto se espera
que sea negativo, habiéndose creado finalmente menos empleo del que se
destruye. Así, los cálculos arrojan un crecimiento estructural de 69 millones
de empleos frente a una caída de 83 millones, lo que equivale a una pérdida neta
de 14 millones de empleos, aproximadamente el 2% del que hay hoy en día.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Los perfiles laborales cuya
demanda probablemente crezca más rápido serán sobre todo aquellos relacionados
con la digitalización y la sostenibilidad. El Foro Económico Mundial identifica
entre éstos los de especialista en inteligencia artificial y aprendizaje
automático, los especialistas en sostenibilidad, analistas de inteligencia de
negocio y analistas en seguridad informática. Les siguen en importancia los de
ingeniero en energías renovables, ingeniero de instalaciones solares e
ingeniero de sistemas. En el otro extremo, los perfiles más proclives a
desaparecer a causa del cambio tecnológico son los relacionados con el trabajo
de oficina, como administrativos y secretarias, cajeros de banco, cobradores,
taquilleros y personal dedicado a teclear datos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El Foro Económico Mundial predice
que el 44% de las habilidades de los trabajadores se verán disrumpidas en los
próximos cinco años. Las habilidades cognitivas van cobrando cada una mayor
importancia de cara a ejercer una profesión, por la importancia que presenta
ahora la capacidad de resolución de problemas complejos. Destaca en este
sentido la importancia que se le otorga al pensamiento creativo, al pensamiento
analítico y a los conocimientos tecnológicos.<o:p></o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-81303303680208835282024-01-15T10:03:00.003+01:002024-01-15T10:03:46.179+01:00Los peligros y las amenazas que acechan en internet<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiEKBBIPD2YP0kKPedx8iEZ_gWYhevQE9BwOkzhaDUoK1BqGu2cqe1yRyPCw9bZZcYZBOvy7ar1izjjbQmk4sUWItEA6jy6IZU6VkdfQ18VrTIKKVkaIoVQaMXRUaJD_PxpKbagrUP8sPqrDPWuAegnTV3BshYi2eSEmi_GabxNDkkg7OqjoqYrj7wvAj-V/s1536/Cobo.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="847" data-original-width="1536" height="176" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiEKBBIPD2YP0kKPedx8iEZ_gWYhevQE9BwOkzhaDUoK1BqGu2cqe1yRyPCw9bZZcYZBOvy7ar1izjjbQmk4sUWItEA6jy6IZU6VkdfQ18VrTIKKVkaIoVQaMXRUaJD_PxpKbagrUP8sPqrDPWuAegnTV3BshYi2eSEmi_GabxNDkkg7OqjoqYrj7wvAj-V/s320/Cobo.jpg" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El vivir en un mundo digital nos
convierte en víctimas potenciales de recibir ataques a través de internet.
Ninguna persona o empresa está a salvo, y se calcula que a finales de 2020 el
coste anual de la ciberdelincuencia para la economía mundial alcanzó los 5,5
billones de euros, el doble de la cifra de 2015. La invasión de Ucrania en 2022
no ha hecho más que agravar la situación, pues ha movilizado a ejércitos
de <i>hackers</i> y ciberactivistas a favor de uno u otro bando,
dispuestos a sembrar el caos y la destrucción en las redes.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La ciberseguridad se ha
convertido en la pieza clave de transición digital, dado que solamente una
estrategia de defensa y protección robusta y efectiva ante las amenazas que
proliferan por el ciberespacio puede garantizar una navegación segura en un
entorno de confianza. Pero igual de relevante resulta que los usuarios sean
perfectamente conscientes de los riesgos asociados al uso de tecnología, y que
sepan evitarlos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Año tras año los ciberdelitos
aumentan en número e intensidad. El año pasado tuvieron lugar notables
incidentes de seguridad por todo el mundo. La empresa de seguridad Astra
destaca los siguientes por su trascendencia:<o:p></o:p></span></p>
<ul style="margin-top: 0cm;" type="disc">
<li class="MsoNormal" style="mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En mayo, y en el marco del conflicto de la
guerra de Ucrania, la Fundación Skolkovo, que representa el esfuerzo ruso
por emular Silicon Valley, sufrió un ataque por parte de hacktivistas
ucranianos, que accedieron a los servidores de la organización y a sus
archivos.<o:p></o:p></span></li>
<li class="MsoNormal" style="mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Por otro lado, la plataforma de finanzas descentralizadas
(DeFi) Jimbos Protocol fue objeto del robo de 4 000 unidades de la
ciberdivisa Ether por un valor de 7,5 millones de dólares.<o:p></o:p></span></li>
<li class="MsoNormal" style="mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Y más: grandes empresas británicas, como
British Airways, Aer Lingus, Boots, y la BBC, sufrieron el denominado ataque
a la cadena de suministro al ser hackeado el software de Transferencia de
Archivos Gestionados (MFT) MOVEit que utilizan, sufriendo el robo de
grandes cantidades de datos personales de sus clientes. La misma brecha de
seguridad en este <i>software</i> afectó a la agencia francesa de empleo,
Pôle emploi.<o:p></o:p></span></li>
<li class="MsoNormal" style="mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En el mes de marzo, la Oficina de Registros
Criminales del Reino Unido (ACRO) recibió un ciberataque que dejó su web
fuera de servicio.<o:p></o:p></span></li>
<li class="MsoNormal" style="mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Por su parte, la web Yellow Pages fue víctima
de una acción de <i>ransomware</i>, es decir, el secuestro de
información sensible mediante su encriptación a cambio de un rescate.<o:p></o:p></span></li>
<li class="MsoNormal" style="mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Finalmente, el colectivo de <i>hackers</i> conocido
como Medusa robó información personal de los alumnos de la red de centros
educativos públicos de Minneapolis, para posteriormente publicarla en
la <i>dark web</i>.<o:p></o:p></span></li>
</ul>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">De acuerdo con la revista <i>Forbes</i>,
ya en el primer trimestre de 2023 los ciberataques globales crecieron un 7%
respecto del mismo periodo del año precedente. Igualmente, estima que son
detectadas 560 000 piezas de<i> malware</i> nuevas cada día, y que
existen más de 1 000 millones de estos programas en circulación. Cada vez
resulta más difícil mantenerse a salvo en las redes, pues la cifra de personas
en el mundo afectadas por brechas de seguridad en lo que llevamos de 2023
asciende a 340 millones. Se dice pronto.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">España se ha convertido en un
objetivo preferido para los ciberatacantes. De acuerdo con un informe de la
firma eslovaca de ciberseguridad ESET, durante la primera mitad de 2023, nuestro
país recibió el 4,9% de todos los ataques a escala mundial, solamente detrás de
Japón (9,5%) y Estados Unidos (7,8%). El <i>ransomware</i> ha sido
una de las modalidades más extendidas en este periodo, y han sufrido delitos de
esta clase entidades como el Hospital Clínic de Barcelona, Euskaltel o
Telepizza.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Ser más digitales nos hace más
cibervulnerables. Por ejemplo, el teléfono móvil, un dispositivo que lleva todo
el mundo en el bolso o el bolsillo, se ha convertido en un objetivo destacado
para los ciberdelincuentes, de forma que, según Statista, a finales de 2022 se
producían más de dos millones de ataques a móviles al mes en el mundo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La ciberseguridad debe estar en
el corazón de cualquier estrategia de digitalización, si bien, como se ha
mencionado al principio, el usuario es la pieza más vulnerable de cualquier
sistema de seguridad, y, por ello, resulta un factor crítico que conozca
perfectamente los peligros a los que se enfrenta en el ciberespacio, y que
disponga de los conocimientos y las herramientas para defenderse de ellos.<o:p></o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-82288654967710855702024-01-08T11:50:00.000+01:002024-01-08T11:50:07.014+01:00Necesitamos que la inteligencia artificial comprenda el mundo<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9zv1pouscPtTwwPWycxiQPPkFIaVdZrY4lelKHx3xAxzIpyS10oz2KJaCoOM382y3oqo6-pfHPkl254bs8NTqWIUso9TBH6Yl6JlJaxuUV2LGDPPWfpunG8BRG3_-IPXNKv4to4_5jnRHp-XRqODWRFxoT9tB_Kb8LaQqO00DXRKUCGulNQY0yIDzKLzB/s500/SDC13056.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="444" data-original-width="500" height="284" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh9zv1pouscPtTwwPWycxiQPPkFIaVdZrY4lelKHx3xAxzIpyS10oz2KJaCoOM382y3oqo6-pfHPkl254bs8NTqWIUso9TBH6Yl6JlJaxuUV2LGDPPWfpunG8BRG3_-IPXNKv4to4_5jnRHp-XRqODWRFxoT9tB_Kb8LaQqO00DXRKUCGulNQY0yIDzKLzB/s320/SDC13056.JPG" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El éxito reciente del chatbot
ChatGPT ha puesto en el centro del debate público la inteligencia artificial,
una tecnología que ha conocido un avance considerable a lo largo de la década
pasada de forma que ya está presente en numerosos aspectos de nuestras vidas.
Aunque ya tratamos con sistemas inteligentes de forma cotidiana, muchas veces
sin darnos cuenta (por ejemplo, cuando las plataformas nos recomiendan
contenidos audiovisuales personalizados o cuando utilizamos el texto predictivo
al escribir un mensaje en el móvil), el producto de la empresa Open.AI nos ha
enfrentado a un nuevo fenómeno asaz vistoso, como es contemplar la capacidad
creativa de las maquinas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Este tipo de inteligencia
artificial se denomina “generativa”, pues da lugar a algún tipo de creación, ya
sea un texto, una imagen o sonido. A pesar de lo novedoso que parecen estas
habilidades, ya existe una larga tradición de algoritmos que escriben novelas o
poesía, o que pintan cuadros o diseñan imágenes. Es probable que la popularidad
que han cosechado los llamados <i>Large Language Models</i> (LLM) -como
ChatGPT, Turing NLG de Microsoft, Bard de Google o Gopher de Deep Mind- resida
en que han abandonado el ámbito de los expertos y están en la mayoría de los
casos en manos de la gente. De esta forma, todo el mundo ha podido probar en
primera persona cómo funcionan estos chatbots y las posibilidades que ofrecen.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Ahora bien, a pesar de lo
espectacular de los resultados que ofrecen, existen voces que señalan las
limitaciones de esta rama de la inteligencia artificial, y lo lejos que está de
emular las funciones del cerebro humano. El pasado agosto, el físico Michio
Kaku denunciaba el sensacionalismo que se ha generado en torno a estos robots
conversacionales, que, a su juicio, no hacen más que seleccionar y ordenar
contenidos de internet, sin saber discernir la verdad de la ficción, ni
distinguir los datos reales de la desinformación. Básicamente, los LLM no
serían más que versiones avanzadas de los buscadores de la web, como Google,
que han estado funcionando durante los últimos veinte años.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Uno de los mayores críticos de la
inteligencia artificial actual es sin duda el profesor y empresario Gary
Marcus, quien considera que la rama más utilizada hoy en día, el aprendizaje
automático y las redes neuronales -responsables de los avances producidos en
los últimos veinte años-, presenta carencias relativas al razonamiento, no
resulta fiable y se aleja de la forma de pensar que tenemos los humanos. A su
juicio, las carencias que presenta el aprendizaje profundo de las redes
neuronales podrían ser salvadas gracias a la denominada inteligencia artificial
simbólica, una aproximación clásica a esta tecnología que hoy en día ha sido
desplazada a un segundo plano.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La inteligencia artificial
simbólica se centra en la manipulación y el procesado de símbolos y conceptos
en vez de grandes cantidades de datos numéricos, como hace el aprendizaje
automático. Este tipo de algoritmos funciona manejando símbolos que representan
objetos o ideas del mundo y sus relaciones. La principal aproximación de esta
rama es el uso de programación basada en la lógica, en la que las normas y los
axiomas son utilizados para realizar inferencias y deducciones.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Mientras que la inteligencia
artificial simbólica es más adecuada para trabajar en entornos de conocimiento
bien definido y estructurado, el aprendizaje automático es más útil cuando
existen grandes volúmenes de datos y patrones complejos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La tesis que defiende Gary Marcus
es que la inteligencia artificial actual basada en el aprendizaje automático y
el aprendizaje profundo solamente podrá seguir evolucionando si se combina con
el enfoque simbólico, en la forma de una inteligencia artificial “híbrida”. De
no ser así, predice que se podría producir otro “invierno de la inteligencia
artificial”, es decir, un estancamiento y un desencanto generalizado en torno a
esta tecnología, como el que tuvo lugar a partir de los años 70 del siglo
pasado.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Para Gary Marcus el futuro de la
inteligencia artificial no puede basarse en modelos basados en un exceso de
datos y en una carencia de conocimiento y raciocinio. Necesitamos sistemas que
manifiesten una elevada comprensión del mundo, lo que conlleva centrarnos en
cómo se representa, adquiere y razona el conocimiento abstracto.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Esta tercera vía de innovación
está siendo explorada por IBM a través de lo que denomina <i>inteligencia
artificial neuro simbólica</i>, un planteamiento experimental que combina el uso
de redes neuronales convolucionales dedicadas a la clasificación de imágenes
con la capacidad de establecer relaciones entre elementos simbólicos, como
secuencias de palabras, de forma que el sistema aprende de sus errores de una
forma mucho más rápida que mediante el entrenamiento clásico de una red
neuronal.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-18001193421579415832023-12-18T11:05:00.000+01:002023-12-18T11:05:14.169+01:00El auge de los medios digitales y la amenaza de la desinformación<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjR9maOcuTzedYzAud_0Pfn-ilv9VhUlH50gwtNeCgAY6NKTvzo5u9m846AzQGY_E-Br0Ad0uCG9g9aPWK2Wq3wFJNJKZJUoEHQmr4cYXcdXiG0HoT_qMN5e5tknRO1uDuGCOYKUgGpPdZ4S2zStnh8fJCiig_pNIn2n-aO9eq4hKa3mVBIlAuNxL9mD6aG/s710/ScannedImage.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="710" data-original-width="623" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjR9maOcuTzedYzAud_0Pfn-ilv9VhUlH50gwtNeCgAY6NKTvzo5u9m846AzQGY_E-Br0Ad0uCG9g9aPWK2Wq3wFJNJKZJUoEHQmr4cYXcdXiG0HoT_qMN5e5tknRO1uDuGCOYKUgGpPdZ4S2zStnh8fJCiig_pNIn2n-aO9eq4hKa3mVBIlAuNxL9mD6aG/s320/ScannedImage.jpg" width="281" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El informe anual que publica el
Reuters Institute for the Study of Journalism ofrece una panorámica sobre los
cambios en los hábitos informativos de la población mundial. La edición de 2023
confirma la aceleración que ha tenido lugar en la tendencia hacia entornos
informativos más digitales, móviles y dominados por las plataformas,
especialmente desde la pandemia y la invasión de Ucrania. Con todo, la
confianza en las noticias ha caído globalmente dos puntos porcentuales respecto
del año pasado, después de haber crecido tras la emergencia sanitaria, de forma
que solamente el 40% de la población encuestada de los distintos países afirma
que confía la mayor parte de las veces en las noticias que recibe. En España
ese porcentaje es notablemente inferior, y se sitúa en el 33%.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Nuestro país en concreto es del
grupo donde más ha caído el interés por las noticias desde 2015, año en que el
85% de la ciudadanía reconocía tener mucho, hasta el escaso 51% de 2023.
Solamente en Argentina se da una caída de tal magnitud -34 puntos porcentuales-,
pues ha pasado de 77% a 43% en el periodo considerado. La proporción de la
bajada suele ser más acentuada en naciones políticamente polarizadas, y dentro
de ellas, entre los estratos más jóvenes de población.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En general, se observa una bajada
del consumo de noticias en todos los mercados que contempla el estudio, lo que
implica una tendencia decreciente continuada del acceso a medios tradicionales,
como la televisión o la prensa escrita, cuyo lugar no es sustituido por
completo por los medios <i>online</i> y las redes sociales. Los
usuarios de internet consumen menos cantidad de noticias que antaño.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En España, en los últimos diez
años ha descendido con fuerza el consumo de noticias vía televisión (del 72% de
la población en 2013 al 56% en 2023) y prensa escrita (del 61% al 25%), y más
ligeramente el consumo a través de internet (79% a 74%). En cambio, en ese
periodo creció considerablemente la proporción de ciudadanía que se informa vía
redes sociales, en concreto, del 28% al 50%. Por otro lado, el 41% de la población
española comparte noticias por medios sociales, correo electrónico o mensajería
instantánea.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Globalmente, el público se
muestra escéptico respecto a los algoritmos de personalización de contenidos en
base al comportamiento pasado del usuario: solamente un 30% de media considera
que supone un buen método para acceder a las noticias. En España, el porcentaje
se sitúa en torno al 36%. Esta burbuja informativa hace que la gente tenga
miedo de perderse información relevante, en concreto, el 48% de los usuarios en
todos los mercados estudiados se siente de esta manera.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El declive del interés por las
noticias y la sustitución de los medios tradicionales por las redes sociales a
la hora de informarse, aparte de constituir una amenaza para el presente y el
futuro de la profesión y la práctica del periodismo, establecen un caldo de
cultivo idóneo para que prolifere la desinformación. Una ciudadanía ajena a la
información fiable sometida al rigor periodístico se convierte en susceptible
de ser manipulada a través de bulos malintencionados.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La primera línea de defensa en la
lucha frente a la desinformación es la propia ciudadanía de un país. De acuerdo
con el Eurobarómetro, la población española es consciente del peligro que
supone la desinformación: en 2022, el 82% lo considera un problema nacional
(frente al 78% de la media europea), y la misma proporción lo percibe como una
amenaza para la democracia (en la UE, el 81%). Sin embargo, solamente algo más
de la mitad (57%) afirma poder identificar con facilidad una noticia falsa,
siendo la media de los países el 65%. No deja de ser una contradicción el que,
según la misma fuente, el 83% de los españoles afirma que se topa con
frecuencia con <i>fake news</i>, a pesar de que pocos dicen reconocerlas.<o:p></o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-24305636522325831112023-11-28T09:23:00.002+01:002023-11-28T09:23:54.859+01:00La buena salud del videojuego español<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhyWC9MmEPkRcUSSyiOpb7uBlKd0QMjsdZnWm4ovlG6QhF4lfjEcyENjlktlco2HrJo9fSRzUOwTNxK5ssgywRc3QO0ttE46tHiuUWHYWNum-gTj5ueURgLVZtp88z1J2QGee97Z2E5NVIkfmRY4MolbafQ_6uLs2ka665bBtKX4viwhmqpeY-EtiXhYboq/s1217/10_301.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1217" data-original-width="1068" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhyWC9MmEPkRcUSSyiOpb7uBlKd0QMjsdZnWm4ovlG6QhF4lfjEcyENjlktlco2HrJo9fSRzUOwTNxK5ssgywRc3QO0ttE46tHiuUWHYWNum-gTj5ueURgLVZtp88z1J2QGee97Z2E5NVIkfmRY4MolbafQ_6uLs2ka665bBtKX4viwhmqpeY-EtiXhYboq/s320/10_301.jpg" width="281" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El videojuego español presenta
muy buenas perspectivas de evolución y es susceptible de convertirse en una
fuente de ingresos y de empleo. El informe anual de la Asociación
Española de Videojuegos (AEVI) destaca que en 2022 el sector superó los 2 000
millones de facturación, siendo una cifra que acerca a nuestro país a las que
se manejan en Francia o Reino Unido. La facturación física asciende a 832
millones de euros, descendiendo respecto del año anterior, mientras que la
facturación <i>online</i> crece hasta los 1 180 millones de euros,
más de un 29% interanual de incremento. En conjunto el sector ha crecido un 12%
en 2022.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Los videojugadores españoles
superan los 18 millones de personas, y parece que los hombres tienden a jugar
algo más que las mujeres, 53% frente al 47% del total. Por edades, el estrato
de población que hace más uso de esta forma de ocio es la situada entre los 11y
14 años (84%), seguido del de 6 a 11 años (79%) y del de 15 a 24 años (71%). A
medida que avanza la edad, menor es el porcentaje de personas que juegan, y a
partir de los 35 años no supone ni la mitad del total. Por otro lado, en España
se juega una media de 7,42 horas a la semana, menos que en países de nuestro
entorno como Alemania (10,2), Reino Unido (9,6), Francia (7,9) o Italia (7,5).
El dispositivo más utilizado para jugar es la consola, seguida del iPhone y del
ordenador.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El <i>Libro blanco del
desarrollo español de videojuegos 2022</i> publicado por DEV establece que
existen 605 estudios de videojuegos constituidos en nuestro país, un 34% más
que en 2017; el número no ha dejado de crecer en ese periodo. La mitad de ellos
se encuentran localizados en Madrid o Cataluña (un 25% en cada comunidad), y
sigue en importancia Andalucía que alberga casi el 16% del total. La antigüedad
media del 60% de los negocios es de cinco o más años, y una cuarta parte lleva
más de diez años en activo, lo que da una idea de la estabilidad del sector.
También se pone en evidencia que se trata de un sector atomizado, en el que
predomina la microempresa, puesto que el 66% de las mismas tiene 10 o menos
empleados, y, casi la mitad, menos de 5.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El empleo del sector no ha parado
de crecer incluso con la crisis por medio, y, en 2022, se situaba en 9 893
trabajadores. Las previsiones apuntan a que alcance las 13 200 personas en
2025. No obstante, si a los empleados del sector se le suman los empleos
indirectos que genera y aquellos trabajadores <i>freelance</i>, el volumen
de ocupación supera la cifra de 14 600. En el aspecto de género, si bien sigue
siendo una proporción baja, las mujeres ya suponen el 24% de los profesionales
dedicados al videojuego, una cifra superior a la media europea (22%), pero
inferior a países como Polonia (25%) o Serbia (30%).<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El Libro blanco sobre este sector señala una serie de tendencias
de futuro:<o:p></o:p></span></p>
<ul style="margin-top: 0cm;" type="disc">
<li class="MsoNormal" style="mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Los
distintos ecosistemas se extienden y las plataformas se entrelazan gracias
a las suscripciones y los servicios. Por ejemplo, Microsoft y Sony han
adoptado el juego Fortnite.<o:p></o:p></span></li>
<li class="MsoNormal" style="mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La
adopción por parte de Apple y Google de herramientas para proteger la
privacidad de sus usuarios ha tenido un impacto inmediato en la industria
del videojuego móvil, pues ya no resultará fácil acceder a las métricas y
los resultados de las campañas.<o:p></o:p></span></li>
<li class="MsoNormal" style="mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La
publicidad <i>in-game</i> se confirma como una nueva fuente de
ingresos. Se trata de publicidad insertada dentro de los propios
escenarios de los videojuegos.<o:p></o:p></span></li>
<li class="MsoNormal" style="mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El
contenido generado por usuarios se ha expandido gracias a la
popularización de los metaversos y juegos f2p (<i>free-to-play</i>).<o:p></o:p></span></li>
<li class="MsoNormal" style="mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La
diversidad, igualdad e inclusión de minorías y colectivos poco
representados siguen aumentando, aunque todavía queda un largo camino por
delante por recorrer en este campo.<o:p></o:p></span></li>
<li class="MsoNormal" style="mso-list: l0 level1 lfo1; tab-stops: list 36.0pt;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El
uso de la inteligencia artificial genera un debate en el sector: para
unos, puede afectar negativamente el trabajo realizado por humanos; para
otros, supone una herramienta para impulsar las creaciones de los
desarrolladores.<o:p></o:p></span></li>
</ul>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-29849501968506636052023-11-06T10:01:00.001+01:002023-11-06T10:01:21.809+01:00El verdadero peligro de la inteligencia artificial generativa<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjkU0TxMYvejleLNySKfO6JLWqBF8rWSFzlIkE3Kq_JLugLbj8vO7C3KTTgdZBnIsfOTrotoCzrTpjJRvMN6o5cOmZIjucNYWngBk5lLBJHIsE_1Un2jFmo2YXUSWXh7uwkenXKzGCfD1jiZ1gTiYRA9kQG0eYpfuQafps6J5FbHCdFeEEb5_Mdgf0WW0Q7/s1219/frutas.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1219" data-original-width="1066" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjkU0TxMYvejleLNySKfO6JLWqBF8rWSFzlIkE3Kq_JLugLbj8vO7C3KTTgdZBnIsfOTrotoCzrTpjJRvMN6o5cOmZIjucNYWngBk5lLBJHIsE_1Un2jFmo2YXUSWXh7uwkenXKzGCfD1jiZ1gTiYRA9kQG0eYpfuQafps6J5FbHCdFeEEb5_Mdgf0WW0Q7/s320/frutas.jpg" width="280" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Aunque parece un argumento de
película de ciencia ficción, ya desde hace tiempo hay expertos avisando de que
la inteligencia artificial se puede volver contra el ser humano. Hace unos años
algunas figuras relevantes de la ciencia y la tecnología -como Bill Gates, Elon
Musk o el mismísimo Stephen Hawking- alzaron su voz alertando sobre los
peligros para la especie que traía consigo el grado de desarrollo actual de
esta tecnología.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El último episodio de esta
historia ha llegado de la mano de los productos basados en la inteligencia
artificial generativa, especialmente aquellos de la empresa estadounidense
Open.AI, como el <i>software</i> generador de imágenes Dall-e o el
chatbox ChatGPT, cuya cuarta versión entró en funcionamiento en 2023 alcanzando
un gran impacto social por su capacidad desplegada de generar conocimiento.
Como es un sistema abierto, todo el mundo ha podido interactuar con ChatGPT4 y
comprobar su habilidad para generar textos sobre cualquier tema sobre el que se
le pregunte. De ahí el revuelo mediático.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Durante la primera mitad de 2023,
el sistema de Open.AI ha ocupado portadas y titulares, y ha generado una ola de
temor a la inteligencia artificial generativa que ha recorrido el mundo. La
inteligencia artificial generativa (IAG) es una rama de la inteligencia
artificial que crea nuevos resultados -un texto, una imagen, un archivo de
sonido- en base a los datos recibidos, a diferencia de los sistemas
tradicionales centrados en el reconocimiento de patrones y en la elaboración de
predicciones. La primera alarma relacionada con esta tecnología ha sonado en el
terreno del empleo: ¿a cuántas profesiones puede desplazar este sistema? ¿qué
competencias actualmente desempeñadas por humanos quedarán obsoletas? El
segundo motivo de preocupación está relacionado con la maestría con la que los
sistemas de IAG pueden crear contenidos falsos que parecen completamente
reales. Suponen, por tanto, herramientas eficaces para crear
desinformación, <i>fake news</i> y <i>deep fakes</i>.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Esta vez han sido los propios
responsables del desarrollo de este tipo de algoritmos los que han anunciado
que traerán consigo el apocalipsis. En una carta publicada el 30 de mayo, 350
ingenieros y ejecutivos de empresas tecnológicas –entre los que se encontraban
Sam Altman (presidente ejecutivo de OpenAI), Demis Hassabis (Google DeepMind) y
Dario Amodei (Anthropic), las compañías más punteras en este campo- han
comparado la amenaza que supone para la humanidad la inteligencia artificial
con una guerra nuclear o una pandemia. Para algunos tecnólogos -encabezados por
Ray Kurzweil- en algún momento no muy lejano, la inteligencia artificial
superará a la humana, y las propias máquinas serán capaces de crear máquinas
mucho más inteligentes que las actuales. Es lo que se denomina la <i>singularidad
tecnológica</i>.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La pregunta clave es ¿está
realmente tan avanzado el grado de desarrollo de la inteligencia artificial?
¿Podemos hablar de inteligencia real o tan solo estamos ante herramientas
estadísticas muy poderosas y sofisticadas?<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">A pesar de su indudable capacidad
para crear contenidos, no parece que los modelos actuales de inteligencia
artificial generativa vayan a desplazar por ahora a la inteligencia humana. Es
verdad que determinadas habilidades que presentan pueden suponer una amenaza
para algunas profesiones, pero por automatizables que resulten algunas tareas
siempre deben llevar supervisión humana. Los algoritmos podrán redactar textos
legales o periodísticos mucho más rápido que los abogados y los redactores, y,
sin embargo, no tienen la capacidad para evaluar la validez de su producto, que
debería ser revisado por un experto en el tema.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La supuesta creatividad de los
modelos amplios de lenguaje también es algo más que cuestionable, dado que lo
que suelen hacer es fundir en sus resultados a las consultas recibidas contenidos
de distintas fuentes. En este sentido, Charlie Brooker, el creador de la
popular serie de Netflix <i>Black Mirror</i>, realizó el curioso
experimento de pedirle a ChatGPT que escribiese el guion de un nuevo capítulo.
El resultado no pudo ser más decepcionante: el algoritmo había cogido las
sinopsis de distintos capítulos y las había mezclado para escribir su trama.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El verdadero peligro de este tipo
de inteligencia artificial es su utilización para crear bulos y mentiras para
inundar los espacios públicos de desinformación que pueda manipular la opinión
pública. El mal uso de la inteligencia artificial generativa por los propios
humanos es la mayor amenaza que presenta en este momento para nosotros. Este es
el aspecto que necesita de mayor legislación y control institucional. Incluso
se ha llegado a sugerir que sería conveniente que cualquier contenido generado
por inteligencia artificial lleve una marca de agua que indique al interlocutor
que se está tratando con un chatbot.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La desinformación y el engaño que
proliferan por los medios de comunicación y, especialmente, a través de las
redes sociales supone una seria amenaza para la democracia. Michael Sandel, profesor
de la Universidad de Harvard, entrevistado por la revista Telos, advierte del
riesgo que supone que las generaciones que vienen pierdan interés por la línea
que separa lo que es falso de lo que es real. En sus palabras: <i>“este es el
verdadero peligro, no solo que cada vez sea más difícil distinguir lo que es
real de lo que es falso, sino que esa distinción deje de importarnos”</i>.
Controlar la utilización que se hace de los algoritmos generativos resulta
crucial en este sentido.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-11141145580206931462023-10-16T11:19:00.001+02:002023-10-16T11:19:33.903+02:00La digitalización empresarial y el mercado de trabajo<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjuekRNJNtNSCw2XIqoem1ZJpVuS0kUJFQ8CVmSdxjjaCaE1UvWrylUe9i91UXrCSb_luttORevaV7uP1ZnYEJ194aKtEY4kfWRRSEaS-EzAKP6jN6Z-l8wH62zf-VVoIoH9KVY7eUbHif19jqUZrLggZSdqnPsqvP1AgdV3Yy0aEte6ASoOlGIgPt2g78n/s500/trabajando.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="375" data-original-width="500" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjuekRNJNtNSCw2XIqoem1ZJpVuS0kUJFQ8CVmSdxjjaCaE1UvWrylUe9i91UXrCSb_luttORevaV7uP1ZnYEJ194aKtEY4kfWRRSEaS-EzAKP6jN6Z-l8wH62zf-VVoIoH9KVY7eUbHif19jqUZrLggZSdqnPsqvP1AgdV3Yy0aEte6ASoOlGIgPt2g78n/s320/trabajando.jpg" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El impacto de la digitalización
en el mercado de trabajo es complejo de analizar. Un reciente informe del Foro
Económico Mundial (<i><a href="https://www.weforum.org/reports/the-future-of-jobs-report-2023/">Future
of Jobs Report 2023. Insight report. May 2023</a></i>) ha intentado arrojar
algo de luz sobre este proceso, realizando una encuesta a empresas y
empleadores de distintos países del mundo. El trabajo confirma la adopción de
tecnología por las empresas como el factor principal de los cambios en el
entorno laboral, si bien también subraya como otra causa importante la
aplicación de los estándares medioambientales, sociales y de gobernanza en el
seno de las organizaciones.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Hablando de digitalización
corporativa, más del 80% de las empresas espera introducir en los próximos
cinco años plataformas digitales y <i>apps</i>, herramientas para la
formación de la plantilla, y sistemas de analítica de <i>big data</i>. En
segundo orden de importancia, en torno a las tres cuartas partes de la muestra
planea incorporar el internet de las cosas (IoT), <i>cloud computin</i>g,
sistemas de ciberseguridad, comercio electrónico, e inteligencia artificial.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El efecto neto sobre el empleo de
la introducción de estas tecnologías se espera que, salvo contadas excepciones,
sea positivo, es decir, que crearán más del que destruyan. Entre las que
presentan un saldo más positivo se encuentran la analítica de <i>big data</i>,
la tecnología para mitigar los efectos del cambio climático, las tecnologías
para la gestión medioambiental, y la ciberseguridad y la criptografía.
Solamente hay dos casos en los que el saldo neto es negativo, es decir, en los
que parece que la destrucción de empleo va a superar su creación, que es en los
robots humanoides y en los que no lo son, como la robótica industrial o los vehículos
autónomos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El ritmo de automatización de las
tareas que se realizan en el seno de las organizaciones sigue creciendo, si
bien a un ritmo más lento de lo esperado. Las previsiones al respecto
realizadas en el informe pasado publicado en 2020, en pleno confinamiento, auguraban
un mayor grado de automatización del que efectivamente ha tenido lugar. Con
todo, las empresas consultadas estiman que el 34% de las tareas son realizadas
por máquinas frente a un 66% de las llevadas a cabo por humanos, un 1% más que
en la precedente. Para 2027, se espera que el porcentaje de automatización
alcance el 42%.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El informe del Foro Económico
Mundial también predice que el 44% de las habilidades troncales que presentan
los trabajadores en la actualidad sufrirán disrupción en los próximos cinco
años. Las empresas de la encuesta han identificado las habilidades que
consideran actualmente más relevantes en sus empleados, siendo las diez
primeras:<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoListParagraphCxSpFirst" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%; mso-bidi-font-family: Georgia; mso-fareast-font-family: Georgia;"><span style="mso-list: Ignore;">1.<span style="font: 7.0pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Pensamiento
analítico<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%; mso-bidi-font-family: Georgia; mso-fareast-font-family: Georgia;"><span style="mso-list: Ignore;">2.<span style="font: 7.0pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Pensamiento
creativo<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%; mso-bidi-font-family: Georgia; mso-fareast-font-family: Georgia;"><span style="mso-list: Ignore;">3.<span style="font: 7.0pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Resiliencia,
flexibilidad y agilidad<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%; mso-bidi-font-family: Georgia; mso-fareast-font-family: Georgia;"><span style="mso-list: Ignore;">4.<span style="font: 7.0pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Motivación<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%; mso-bidi-font-family: Georgia; mso-fareast-font-family: Georgia;"><span style="mso-list: Ignore;">5.<span style="font: 7.0pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Curiosidad
y aprendizaje de por vida<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%; mso-bidi-font-family: Georgia; mso-fareast-font-family: Georgia;"><span style="mso-list: Ignore;">6.<span style="font: 7.0pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Alfabetización
digital<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%; mso-bidi-font-family: Georgia; mso-fareast-font-family: Georgia;"><span style="mso-list: Ignore;">7.<span style="font: 7.0pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Credibilidad
y detallismo<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%; mso-bidi-font-family: Georgia; mso-fareast-font-family: Georgia;"><span style="mso-list: Ignore;">8.<span style="font: 7.0pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Empatía y
escucha activa<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%; mso-bidi-font-family: Georgia; mso-fareast-font-family: Georgia;"><span style="mso-list: Ignore;">9.<span style="font: 7.0pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Liderazgo
e influencia social<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoListParagraphCxSpLast" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-align: justify; text-indent: -18.0pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%; mso-bidi-font-family: Georgia; mso-fareast-font-family: Georgia;"><span style="mso-list: Ignore;">10.<span style="font: 7.0pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]--><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Control
de calidad<o:p></o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-85991907162888300692023-10-02T11:39:00.001+02:002023-10-02T11:39:50.523+02:00La vida digital de los españoles<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiA86RfEcgso43FKqbYGyiPyCTuEG_2pB-OynHS-jILJ1-cMf-TlA_Pja9oioT4aRq2P5s4qcrMFkkfcbwjiqXRN1vrrERbjrkBxtU1QOMawLFNnB7kZlDWJinrjkKfvTqZZqv4Wx6hLyIhSiAu7mX1l3tPFI-MrLW2z5TjfpgvRT2i7qRnj1UHxMcXedh9/s569/Deformado.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="569" data-original-width="525" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiA86RfEcgso43FKqbYGyiPyCTuEG_2pB-OynHS-jILJ1-cMf-TlA_Pja9oioT4aRq2P5s4qcrMFkkfcbwjiqXRN1vrrERbjrkBxtU1QOMawLFNnB7kZlDWJinrjkKfvTqZZqv4Wx6hLyIhSiAu7mX1l3tPFI-MrLW2z5TjfpgvRT2i7qRnj1UHxMcXedh9/s320/Deformado.jpg" width="295" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Un año más la agencia <a href="https://wearesocial.com/es/blog/2023/01/digital-2023/" target="_blank"><b>We
are social</b></a> publica su informe digital sobre el uso de internet en
el mundo, y, como en otras ocasiones, ha dedicado un análisis específico a
nuestro país. Este trabajo se ha convertido en una herramienta muy interesante
para medir la penetración digital desde distintos aspectos, porque, aunque su
forma de medir los distintos indicadores puede diferir de otras fuentes, como,
por ejemplo, las de la Unión Europea, la globalidad de la iniciativa hace que
permita realizar comparaciones con otros países y con las medias mundiales.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Los datos ofrecidos para España,
referidos a enero de este año, arrojan 58 millones de conexiones celulares -equivalentes
al 122% de la población-, más de 45 millones de usuarios de internet -94,9% de
la población-, y alrededor de 40 millones de usuarios activos de redes
sociales, el 85,6% de la ciudadanía española. La proporción de conexiones
móviles es algo menor que el área de referencia, Europa occidental, que
presenta una media de 127% de la población, y menor que Europa del norte (133%)
y Europa del este (147%). En cambio, la proporción de usuarios de internet es
ligeramente superior a la media de Europa occidental (93,5%), y también la de
usuarios de redes sociales (83,3%).<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En relación con la posesión de
dispositivos de conectividad, el 97,5% de la ciudadanía entre 16 y 64 años
dispone de un teléfono móvil, y prácticamente son todos inteligentes, pues el
97,4% posee un <i>smartphone</i>. En cambio, solamente tres cuartas partes
de la población dispone de ordenador -portátil o de sobremesa-, y poco menos de
la mitad de tableta. Ambos porcentajes han bajado respecto del año anterior.
Resulta preocupante este menor uso de ordenadores, pues para los usos más
avanzados de internet -como la teleformación o el teletrabajo- el móvil es un
dispositivo a todas luces insuficiente. Menos peso tienen las consolas de
videojuegos, que solamente están en manos del 41% de la población, y los
relojes inteligentes (43%). Y, desde luego, la tecnología que sigue sin cuajar
es la relativa a la realidad virtual, pues únicamente el 5,1% de la ciudadanía
tiene dispositivos para acceder a ella, si bien hay que subrayar que esta
proporción ha crecido un 27% en un año.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El informe de <b>We are
social</b> refleja por primera vez en 2023 una ligera caída anual en el
tiempo que dedicamos a internet (5 horas y 45 minutos de media), una tendencia
en consonancia con el resto del mundo, pero, en cambio, sube el empleado en
consumo de televisión -tradicional y de internet-, de música en <i>streaming</i>,
y en el uso de redes sociales. La subida interanual más significativa es la de
tiempo dedicado a escuchar podcasts (14%), que a principios de 2023 se situó en
40 minutos de media. El 54,3% del tráfico web se realiza a través de <i>smartphones</i>,
y el 43% mediante ordenadores de cualquier tipo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Las búsquedas de información son
la principal actividad que realizan en internet los españoles y las españolas
(71% de los usuarios), seguidas de la consulta de las noticias de actualidad
(61%), y del acceso a tutoriales para aprender a hacer cosas (60%). El 57% usa
las redes para organizar viajes y vacaciones, y también para mantener el
contacto con amistades y familiares. En el extremo opuesto, sólo el 36% usa el
medio digital para realizar gestiones digitales y para formarse, siempre de
acuerdo con los datos que maneja<b> We are social</b>.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Las webs más visitadas (entre
septiembre y noviembre de 2022) son las de Google y YouTube, seguidas de la del
diario deportivo <i>Marca</i>, Twitter y Porno.Hub. De las páginas
españolas, destacan las de los diarios <i>As</i> (puesto 6), <i>El
Mund</i>o (11), <i>Sport</i> (14), <i>20 Minutos</i> (15), <i>Mundo
Deportivo</i> (16) y <i>El País</i> (17).<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Otras estadísticas curiosas de
uso de internet son, por ejemplo, que más de una quinta parte de los
cibernautas ya utiliza asistentes de voz, como Aura o Siri, para realizar
búsquedas en la red, y que hasta el 43% hace uso cada semana de herramientas
para la traducción de textos de y a otros idiomas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En relación con los medios
sociales, el 90,2% de los cibernautas accede a redes sociales, utiliza una
media mensual de seis plataformas distintas, y les dedica 1 hora y 55 minutos
diarios. Las principales motivaciones son mantener el contacto con amigos y
familiares, ocupar el tiempo y leer nuevas historias. La plataforma más
utilizada es WhatsApp (casi el 90% de los usuarios españoles de internet),
seguida de Instagram (79,5%) y Facebook (72,5%).<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En cuanto a las <i>apps</i> más
descargadas por la ciudadanía, encabeza la lista la tienda de moda <i>online</i> Shein,
seguida de Tik Tok y Telegram. El cuarto puesto lo ocupa el portal móvil de
servicios financieros de Caixabank, y, tras WhatsApp e Instagram, aparece el
programa Cl@ve de la Agencia Tributaria.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Las finanzas digitales también
van calando cada vez más en España. El 97% de la población mayor de 15 años realizó
un pago digital el pasado año, el 57,8% realizó una compra utilizando un
teléfono móvil o internet, y el 53% usó un teléfono móvil o internet para
transferir dinero. Sobre las formas de pago en el comercio minorista, el 30% de
las transacciones se realizó por medio de monederos digitales, el 47% a través
de tarjetas de crédito y débito, el 15% con transferencia bancaria, y solamente
el 3% con efectivo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Por otro lado, el 53,7% de los
cibernautas ha comprado en internet semanalmente, el 19% ha adquirido alimentos,
y casi el 15% ha comprado productos de segunda mano <i>online</i>. Los
contenidos digitales más comprados mensualmente son los de vídeo a través
de <i>streaming</i>, 38% de los usuarios de internet, seguidos de la
música en <i>streaming</i>, que son adquiridos por el 21,8%. El <i>streaming</i> se
perfila como el medio de consumo audiovisual preferido, puesto que el pago por
descarga de archivos presenta porcentajes mucho más reducidos: 7,9% de
internautas en el caso de las películas, y 8,9% en el de la música.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Son unos datos que demuestran que
la sociedad española es cada vez más digital y que nuestras vidas transcurren
en mucha medida en internet.<o:p></o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-40684054275864548422023-09-18T10:00:00.002+02:002023-09-18T10:00:55.612+02:00Tecnología contra la despoblación del mundo rural<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjS4AQwr-kbkfqpxakO5BRkrcl09pde6qv_xrqXad0flKtAE5ikdfavqi9U13WAfXcO5hhBaljLF4SRvK9ebOmJVIQ3mE5THEtMmXA7x7Iq8uw8KSHvYHFWzXRpx0-BUKmfG3DQaNnYKaWdgg1IIW8eg2YOx1xS8Px7RgpwFROKHObzbkzf3PFtQOCKzbsV/s720/Bluesman%20on%20the%20road.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="479" data-original-width="720" height="213" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjS4AQwr-kbkfqpxakO5BRkrcl09pde6qv_xrqXad0flKtAE5ikdfavqi9U13WAfXcO5hhBaljLF4SRvK9ebOmJVIQ3mE5THEtMmXA7x7Iq8uw8KSHvYHFWzXRpx0-BUKmfG3DQaNnYKaWdgg1IIW8eg2YOx1xS8Px7RgpwFROKHObzbkzf3PFtQOCKzbsV/s320/Bluesman%20on%20the%20road.jpg" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La urbanización del mundo se ha
acelerado, y Naciones Unidas calcula que el 55 % de la población global habita
en ciudades, y vaticina además que en 2050 esta cifra superará las dos terceras
partes. Y otro dato: es probable que en 2030 existan 43 megaciudades de más de
10 millones de habitantes. El modelo de ciudad heredado del siglo XX es
difícilmente sostenible, y actualmente existen muchos problemas que dificultan
la vida de los ciudadanos, que minan su calidad de vida o reducen su nivel de
bienestar. El urbanismo de esta época está siendo replanteado en muchos países,
y hay grandes ciudades -París es un paradigma en este sentido-, que están
viendo cambiar su fisonomía en aras de un modelo más centrado en las personas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La tecnología es un poderoso
aliado para optimizar el funcionamiento urbano y su gestión, gracias a la
posibilidad que ofrece de recoger cualquier tipo de dato en tiempo real,
procesarlos en grandes cantidades y convertirlos en una herramienta de análisis
para el apoyo de la toma de decisiones. En este sentido, el diseño y la
configuración del espacio urbano del presente siglo, siga la orientación que
siga, lleva a asociado indefectiblemente la aplicación de inteligencia; más
tarde o más temprano todas las ciudades serán <i>smart</i>.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Ahora bien, en los últimos
tiempos se han alzado voces denunciado lo limitado del concepto de <i>smart
city</i> en relación con las necesidades reales del desarrollo regional.
Es decir, el concebir la ciudad como una entidad en sí misma, aislada del
territorio al que pertenece, supone una abstracción y una negación de la
realidad geográfica, susceptible de abrir brechas entre el entorno urbano o
rural, o ahondar las ya existentes. Es por ello, que muchos prefieren hablar de
territorios inteligentes, en vez de ciudades inteligentes, como una forma de
articular territorialmente las políticas de optimización de la gestión de
comunidades basadas en la tecnología.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El concepto de territorio
inteligente no es solo la extensión de la ciudad inteligente, sino también su
opuesto. La digitalización de la urbe es susceptible de abrir brechas en los
territorios, especialmente en las áreas rurales circundantes que carecen de los
servicios y capacidades del medio urbano. Por lo tanto, el desarrollo de
la <i>smart city</i> puede ampliar y profundizar los desequilibrios
territoriales existentes.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En sentido amplio, se entiende
por territorio inteligente aquel que hace uso de la tecnología de forma
innovadora para mejorar el nivel de vida de la población y para impulsar la
eficiencia y la competitividad de las operaciones y los servicios urbanos,
garantizando que satisface las necesidades de las generaciones presentes y
futuras, a la vez que respeta los aspectos culturales. En la práctica, se trata
de redes integradas por núcleos poblacionales interconectados, pudiendo abarcar
tanto zonas rurales como urbanas. De esta forma, se convierte en una
herramienta para combatir los desequilibrios territoriales y articular
adecuadamente la relación entre áreas urbanas y rurales, favoreciendo el
desarrollo de estas últimas y frenando el proceso de despoblación.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Es importante señalar que un
territorio inteligente no tiene por qué coincidir necesariamente con una unidad
administrativa, es decir, no tiene por qué ser una comunidad autónoma,
provincia, comarca u otras. Es por ello, que hay autores que proponen sustituir
el término territorio inteligente por el de <i>comunidad inteligente</i>,
para subrayar que la delimitación espacial de la iniciativa no está determinada
por la organización territorial existente, sino por las personas que se van a
beneficiar de un plan integral que lleva definidos unos objetivos a lograr,
unas acciones a llevar a cabo para ello, y los medios necesarios para
acometerlas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Los territorios inteligentes
contribuyen a la cohesión social y geográfica al promover el acceso igualitario
de la población rural a los servicios. Por ejemplo, al permitir la gestión de
líneas de transporte interurbano “bajo demanda” en lugar de “por defecto”, es
decir, diseñando la ruta basada en la demanda real, optimizando los tiempos y
costes a las necesidades concretas. Otra aplicación puede ser la gestión de la
demanda de asistencia sanitaria ambulatoria en el ámbito rural mediante
herramientas digitales que organizan eficientemente los desplazamientos del
personal sanitario.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La tecnología digital tiene
numerosas áreas de aplicación en el marco de la gestión municipal, siendo las
más comunes la sostenibilidad medioambiental (control de emisiones y de ruido),
la movilidad (optimización de los desplazamientos), la seguridad (vigilancia y
prevención) y la prestación de servicios públicos (sanidad, educación y
formación, atención al ciudadano). A pesar de lo heterogéneo de las acciones y
proyectos que pueden integrar una estrategia <i>smart</i>, resulta
recomendable contar con un plan integral que contemple conjuntamente y de forma
articulada las principales dimensiones que hay que tener en cuenta: gobierno,
movilidad, medioambiente, estilo de vida, ciudadanos y economía. Los distintos
aspectos de la estrategia se pueden secuenciar en fases, pues no hace falta
acometerlos de forma simultánea.<o:p></o:p></span></p><br /><p></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-11518141269097784902023-09-04T10:14:00.001+02:002023-09-04T10:14:30.940+02:00Internet es la televisión del siglo XXI<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAgN_AeVrmkC_y_ZQW9SO4tEDW5usvktyXgRMWeGzBJUTPTPfMlM1IgP-mJI5k5-ur_o0HTj2fK3MHU-E17500wz-wMTHmLHR2D-jHjh0SWFuNgMuNEd3NeDTa5qoeeYZ_V_8JG0Kkyl7w4EIT5sDsJ0Zlc-4NB8_Fzqiao1SM3Qi3Jc-liQ6VutYyMVZM/s1544/Berlin.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="841" data-original-width="1544" height="174" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAgN_AeVrmkC_y_ZQW9SO4tEDW5usvktyXgRMWeGzBJUTPTPfMlM1IgP-mJI5k5-ur_o0HTj2fK3MHU-E17500wz-wMTHmLHR2D-jHjh0SWFuNgMuNEd3NeDTa5qoeeYZ_V_8JG0Kkyl7w4EIT5sDsJ0Zlc-4NB8_Fzqiao1SM3Qi3Jc-liQ6VutYyMVZM/s320/Berlin.jpg" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El mercado audiovisual ha
experimentado profundos cambios a lo largo de las últimas décadas. Los avances
en la tecnología digital han introducido nuevos formatos para ofrecer
contenidos, trastocando los modelos de negocio y abriendo la competencia a
agentes procedentes de otros sectores de actividad y a compañías de muy
reciente creación, que conviven con las empresas tradicionales de radiodifusión
en un entorno con unas reglas muy distintas de las que conoció el siglo XX. Hoy
en día van marcando el paso del sector globalmente nombres como Netflix, una
antigua empresa de alquiler de vídeo, Amazon, un gigante del comercio
electrónico y plataforma de sistemas informáticos, HBO, que nació como canal de
televisión por cable, Apple TV, propiedad de una compañía de <i>software</i>,
o Disney +, creada por una productora de cine infantil y juvenil.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Desde el punto de vista
tecnológico, el mundo ha pasado de la televisión analógica (terrestre, por
satélite o por cable), a la digital en sus múltiples formatos: televisión en
abierto, televisión digital terrestre (TDT), por satélite, televisión por IP,
servicios de vídeo bajo demanda OTT… Internet se ha convertido en un canal
fundamental para ofrecer servicios audiovisuales, aprovechando la revolución
que han conocido las telecomunicaciones en términos de ancho de banda (fibra
óptica, 4G y 5G), que permiten el consumo en formato<i> streaming</i>. Se
trata de una modalidad que se ha posicionado como la preferida a lo largo de la
pasada década.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">También desde la perspectiva de
los modelos de negocio el momento actual presenta un variado espectro de opciones.
La televisión en abierto sigue dependiendo de los ingresos publicitarios, pero
a veces ofrece contenidos <i>premium</i> de pago (por ejemplo, en
España están Mitele Plus de Mediaset y Atresplayer Premium de Atresmedia). Las
operadoras de telecomunicaciones ofrecen televisión por IP como un plus de sus
servicios de conectividad, y en ocasiones -como ocurre con Movistar+-, combinan
la suscripción con la publicidad como formas de obtener ingresos. Las
principales plataformas OTT (<i>Over-The-Top</i>), como Netflix y HBO,
funcionan bajo el modelo SVOD (<i>Suscription Video On Demand</i>), es decir,
basando el servicio en los pagos por suscripción sin incluir publicidad, si
bien en el escenario actual se plantea que algunas de estas empresas comiencen
a ofrecer en paralelo contenidos de forma gratuita o a una cuota menor, pero
incluyendo anuncios. Tanto Netflix como Disney+ lanzaron su versión “básica con
anuncios”, a finales de 2022 en EE.UU., y en el primer caso ya se ofrece en
España, mientras que la de Disney llegará en noviembre de este año. En el caso
de Amazon, su servicio de vídeo está ligado a la suscripción a su servicio
Prime que garantiza la entrega rápida de las compras realizadas. En suma, hay
casi tantos modelos como <i>players</i>.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La importancia que ha adquirido
internet como canal de consumo de contenidos audiovisuales queda patente en el
siguiente dato que ofrece IAB: en España, el 82% de los internautas de entre 16
y 75 años utiliza servicios de contenido audiovisual a través de internet para
TV, independientemente del dispositivo de acceso. Se trata de una cifra de
población que supera los 27 millones de usuarios. Como es de esperar, este
comportamiento no es homogéneo entre la población de distintas edades, y son
los jóvenes los que más uso hacen de la televisión conectada (87% de los
menores de 30 años), y los mayores los que menos (77% de los mayores de 50).<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Otro dato interesante que ofrece
el informe de IAB es la relevancia que han adquirido las plataformas digitales
-como Netflix, HBO o Atresplayer, por poner tres ejemplos-, puesto que el 87%
de los usuarios consumen contenidos por ese medio. Los canales de TV a través
de plataforma de televisión en APP (servicio de <i>streaming</i> o
STB de operadora), como pueden ser Movistar+ o Orange TV, tienen una difusión
mucho menor, dado que solo son utilizados por el 42% de los encuestados. Hay
que advertir no obstante que estos últimos son servicios audiovisuales
asociados generalmente a los paquetes integrados comercializados por las
operadoras, que incluyen además conectividad fija y móvil, por lo que no están
abiertos a cualquier usuario de internet como ocurre con las plataformas OTT.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-65358392322152967362023-06-28T10:12:00.001+02:002023-06-28T10:12:28.341+02:00El triunfo del dinero digital<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiy_nEcW0iSsiUscR2UGzhXqXiPV6SBgL_QZLdV-aO0ihP23ps0u3gTI9dCJWpZw5Db9ulPwXDyqy79fcyxyRnZ6XaAVBSk3Sa14aitIDULqokG7Q2LOYhyS9UnrT-Y6P1YsVMGf0bcblA8vvf_l1362GL5-4QbyvzYqDWJ9WMN918AOXpVduiwC4-WrfWt/s1800/1920_istock-000068886757-large.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1200" data-original-width="1800" height="213" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiy_nEcW0iSsiUscR2UGzhXqXiPV6SBgL_QZLdV-aO0ihP23ps0u3gTI9dCJWpZw5Db9ulPwXDyqy79fcyxyRnZ6XaAVBSk3Sa14aitIDULqokG7Q2LOYhyS9UnrT-Y6P1YsVMGf0bcblA8vvf_l1362GL5-4QbyvzYqDWJ9WMN918AOXpVduiwC4-WrfWt/s320/1920_istock-000068886757-large.jpg" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">A lo largo de las últimas
décadas, el efectivo ha ido perdiendo importancia en favor de los pagos
electrónicos. En un principio, las tarjetas acapararon el protagonismo,
especialmente cuando comenzó a despuntar la compra por internet, pero en la
actualidad cobran una importancia creciente los pagos por medios móviles.
Curiosamente, este fenómeno es más agudo en el mundo en desarrollo, que ha
pasado directamente de economías dependientes del dinero en efectivo a las
transacciones móviles, sin recalar en el dinero de plástico. La pandemia no
hizo más que acelerar una tendencia en marcha, intensificando el uso de
herramienta de pago que implicasen el menor contacto físico entre terminales para
evitar el riesgo de contagio. A pesar de que queda todavía mucho para llegar a
una sociedad sin efectivo -para algunos no es un objetivo deseable por la
amenaza que supone para la privacidad-, parece muy probable que la base de esta
serán los pagos a través del teléfono móvil.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Se prevé que los pagos sin
efectivo aumenten más de un 80% entre 2020 y 2025. De acuerdo con el análisis
realizado por PwC, la zona de Asia y el Pacífico irá a la cabeza con un
incremento del volumen de transacciones sin efectivo del 109% hasta 2025, que
supondrá un 76% entre ese año y 2030. El continente africano le seguirá con
unas cifras del 78% en el primer periodo y de 64% en el segundo, y Europa se
coloca en tercer lugar, con unos porcentajes del 64% y del 39%, respectivamente.
Presentan una menor expectativa de crecimiento Latinoamérica (52% y 48%,
respectivamente), y Estados Unidos y Canadá (43% y 35%).<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Dentro de las finanzas digitales,
destaca el peso del “dinero móvil” o lo que lo mismo, el uso del teléfono móvil
como instrumento para realizar transacciones económicas. De acuerdo con los
datos que ofrece GSMA, en 2021 el valor global de las operaciones realizadas
por este medio supero el billón de dólares. Además, había registradas en el
mundo más de 1 350 millones de cuentas de dinero móvil, diez veces más que la
existentes en 2012.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Cada vez se utiliza más el <i>smartphone</i> como
una tarjeta física, ya sea de débito o crédito. Para ello, resulta
indispensable disponer de un chip NFC en el teléfono, para que el móvil se
pueda comunicar con el TPV (terminal en punto de venta). Pero, en caso de no
disponer de NFC, existe la posibilidad de utilizar <i>apps</i> que
permiten realizar transferencias inmediatas, como Bizum, que se ha convertido
en una de las más populares dado que supera los 22 millones de usuarios y
acumula más de 1 400 millones de transacciones desde su lanzamiento.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La tecnología adquiere cada vez
un mayor protagonismo en el sector financiero. El consumidor se convierte ahora
en centro de atención sustituyendo al producto, pues gracias al medio digital
tiene una mayor capacidad para acceder a los mercados, y, por lo tanto, el
modelo de comercialización de las entidades debe ajustarse a las nuevas
necesidades que presenta. El volumen de negocio digital del sector bancario no
para de crecer. En España, una encuesta de KPGM refleja que en España en enero
de 2021 casi el 40% de las entidades tenían más del 80% de clientes digitales
sobre el total, frente al 22% del año anterior.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El uso de la banca electrónica
cada vez está más extendido entre la población española. Una encuesta realizada
por Funcas a finales de 2022 establece que el 72% de la ciudadanía accede a su
banco <i>online</i> al menos una vez a la semana, y más de la tercera
parte lo hace diariamente, mientras que antes de la pandemia tan solo el 17% lo
hacía. Por el contrario, la visita a la sucursal física cada vez es menor:
solamente el 16,5% reconoce que lo hace por lo menos una vez al mes.<o:p></o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-39597817711613168662023-06-13T11:07:00.001+02:002023-06-13T11:07:19.852+02:00Las ciberamenazas crecientes<p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiLCbNP0DuIyXdN6Rg-cbBQYLKYA_6WtUq01gR_YET0IcX2Wjd0ivbPfs5ESNhWt57XLBGyWw7IdEPNtatbZcVhAdrt0qyjcLmmCISh6W21I5VLoiAQA9m-AtRSLgE_Ef4Sv_HSoOqOsnmkflDvuh-ksnoQykrFXOJaAvZSm6zQU6ARmX5yn_iQLY1tVQ/s1536/Cobo.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="847" data-original-width="1536" height="176" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiLCbNP0DuIyXdN6Rg-cbBQYLKYA_6WtUq01gR_YET0IcX2Wjd0ivbPfs5ESNhWt57XLBGyWw7IdEPNtatbZcVhAdrt0qyjcLmmCISh6W21I5VLoiAQA9m-AtRSLgE_Ef4Sv_HSoOqOsnmkflDvuh-ksnoQykrFXOJaAvZSm6zQU6ARmX5yn_iQLY1tVQ/s320/Cobo.jpg" width="320" /></a></div><br /><span style="background-color: white; color: #333333; font-family: "Roboto Condensed"; font-size: 19px;"><br /></span><p></p><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Una vida digital reposa sobre
unas redes seguras y fiables para el usuario. No obstante, las ciberamenazas continúan
creciendo en importancia y cantidad. La Agencia de la Unión Europea de
Ciberseguridad (ENISA) señaló en su último informe anual las principales
amenazas y ataques que tuvieron lugar sobre los sistemas informáticos entre
julio de 2021 y julio de 2022, y constató que el <i>ransomware</i> y
el <i>malware</i> han seguido encabezando la lista de ciberataques,
al igual que en el informe del año anterior. En el primer caso, se trata de la
encriptación de datos de la organización y la solicitud de un rescate económico
para restablecer la información, y, en el segundo, son programas maliciosos que
desarrollan procesos no autorizados con efectos adversos en la integridad o
disponibilidad de un sistema.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En tercer lugar en importancia,
ENISA destaca amenazas relacionadas con la ingeniería social, seguida de las
amenazas contra los datos que tienen que ver con brechas y fugas de información
en las compañías, y amenazas contra la disponibilidad basadas en la denegación del
servicio (especialmente ataques DDoS, es decir, cuando un ejército de
ordenadores realizan peticiones masivas a un servidor de red para tirarlo abajo).
El <i>cryptojacking</i>, ciberdelito mediante el que el criminal utiliza
secretamente el poder de computación de la víctima para minar criptodivisas,
figuraba entre los más destacados en 2021, pero parece que había perdido relevancia
en 2022.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El informe de ENISA ha podido
identificar cuatro tendencias claras que parecieron guiar las ciberamenazas en
2022:<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El impacto de la geopolítica, y,
muy en concreto, de la guerra en Ucrania</span></i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">. Resulta evidente que el
conflicto ha reconfigurado el escenario del ciberdelito. Las operaciones
llevadas a cabo por hacktivistas (<i>hackers</i> que actúan por una causa)
se han intensificado en este periodo, y han estado a menudo alineadas con
acciones militares físicas. En paralelo, el empleo de la desinformación como
arma de combate empezó a tener lugar incluso antes de la invasión física a
Ucrania, en forma de acciones preparatorias de la campaña para condicionar a la
opinión pública.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Los ciberatacantes aumentan su
capacidad de hacer daño</span></i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">. ENISA ha detectado un uso relevante de
ataques de día cero (<i>zero-day-attack</i>), que explotan la vulnerabilidad de
los sistemas de defensa de las organizaciones, así como de los modelos <i>hacker-as-a-service</i>,
que ponen la ciberdelincuencia al alcance de cualquiera sin necesidad de que
tenga conocimientos avanzados de informática. Igualmente, aparece un aumento de
los ataques a la cadena de suministro, como se ha comentado más arriba.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Los ataques de tipo ransomware
continúan siendo los más extendidos</span></i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">. En este sentido, una encuesta
internacional de Sophos llevada a cabo en febrero de 2022 arrojaba que el 66%
de las empresas habían sufrido este tipo de ciberataque (en 2020 fueron el
37%). Los efectos son devastadores: el 90% vio afectada su capacidad operativa
y el 86% sufrió pérdidas de ingresos como consecuencia de la agresión. En
España, la proporción de empresas que han sufrido un ciberataque de <i>ransomware</i> aumentó
del 14% en 2021 al 22% en 2022, de acuerdo con la información ofrecida por
Hiscox.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">No obstante, en el periodo
estudiado también han cobrado importancia los ataques DDoS, en gran medida
asociados al conflicto entre Rusia y Ucrania, que están ganando complejidad y
dirigiéndose hacia las redes móviles y hacia las redes del internet de las
cosas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Aparecen formatos de ataques
nuevos e híbridos</span></i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">. El escándalo relacionado con el programa espía
Pegasus -que llegó a afectar a miembros del Gobierno de España- ha destapado el
riesgo que presenta este tipo de <i>software</i> para el control y la
vigilancia de la sociedad civil. Otra modalidad en auge es el <i>phishing</i> consentido,
en el que la víctima da acceso a programas maliciosos en su dispositivo al
hacer clic en un enlace enviado por el atacante. Los sistemas de inteligencia
artificial basados en aprendizaje automático (<i>machine learning</i>) se están
convirtiendo cada vez más en diana de los cibertataques. Finalmente, la propia
inteligencia artificial se utiliza de forma creciente para crear y
difundir <i>fake news</i> y <i>deep fakes</i> (vídeos falsos
comprometedores).<o:p></o:p></span></p><br /><p></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-5866683327360035732023-05-29T09:50:00.001+02:002023-05-29T09:50:43.483+02:00Tendencias de evolución del mercado de trabajo<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiYlJUHxu56PCccNTe21xCkt_xxGfkEIDEgPfvCLl5OHFzovzjc4GDr-VnxW60_aYJaUUxugWtUzzAyv6B2VZ57l4I6rUM1uOWwH7JD51L5S2RU6y-MvRirOcr55igFqkgkjIEvo4PSi-_h8yDkYoAYhLMJAxqxsp6G8njs4bi9tAVFBPNGC1KsKFaQQg/s2048/DSC_1695.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1362" data-original-width="2048" height="213" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiYlJUHxu56PCccNTe21xCkt_xxGfkEIDEgPfvCLl5OHFzovzjc4GDr-VnxW60_aYJaUUxugWtUzzAyv6B2VZ57l4I6rUM1uOWwH7JD51L5S2RU6y-MvRirOcr55igFqkgkjIEvo4PSi-_h8yDkYoAYhLMJAxqxsp6G8njs4bi9tAVFBPNGC1KsKFaQQg/s320/DSC_1695.JPG" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El futuro del trabajo a medio
plazo se verá afectado directa o indirectamente por una serie macrotendencias,
algunas de las cuales tienen que ver con las nubes que se ciernen sobre la
situación internacional. La consultora GlobalData identifica la crisis de las
cadenas de suministro internacionales entre las más relevantes. La pandemia del
COVID-19 y sus efectos persistentes en la economía china, y, posteriormente, el
conflicto ruso ucraniano, han creado problemas de abastecimiento y subidas
disparadas de precios en sectores como la energía, la química, productos
metálicos o la alimentación, entre muchos otros.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Una de las consecuencias directas
de esta disrupción de las redes de abastecimiento globales es la relocalización
de la producción desde los países emergentes de vuelta a los países de origen,
como una forma de garantizar la autosuficiencia, por lo menos en lo relativo a
la fabricación de bienes esenciales. GlobalData afirma que en los últimos dos
años tres cuartas partes de las empresas de Reino Unido han aumentado la
proporción de proveedores locales. Hay quien asocia esta tendencia con una
inversión del proceso de globalización que lleva en marcha tres décadas, de
forma que avanzaríamos hacia un mundo menos conectado que el actual, en el que
primarían de nuevo los estados fuertes y las soluciones locales a los
problemas, caracterizado por barreras fronterizas que limitan el flujo de
personas y mercancías. De hecho, el peligro de la desglobalización fue uno de
los temas que abordó el Foro Económico Mundial en su reunión de Davos de mayo
de 2022.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Otra gran tendencia actual que
afecta al mundo de las organizaciones, y que puede tener impacto sobre el
trabajo, es el cumplimiento de criterios ESG (<i>environmental, social and
governance</i>), es decir, los factores ambientales, sociales y de gobierno
corporativo que se toman en cuenta a la hora de invertir en una empresa. Más
directamente en el terreno del empleo, GlobalData también identifica como una
tendencia postpandemia el abandono en masa de la fuerza laboral, lo que se ha
dado en llamar “la gran renuncia” (<i>Great Resignation</i>), que implica que
en algunos países queden cada vez más puestos de trabajo sin cubrir. El FMI
calcula que, en EE. UU., Reino Unido, Canadá y Australia, había a finales de 2021
entre el 50% y el 80% más plazas vacantes que antes de la crisis sanitaria.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Uno de los grandes temas del
ámbito laboral que emerge en la década pasada es la <i>gig economy</i>,
una economía basada en plataformas digitales, bajo demanda centrada en trabajos
esporádicos y de corta duración, que son desempeñados por personas que reciben
una remuneración por cada una de las tareas realizadas. Aunque se planteaba
como un gran yacimiento de empleo, en los últimos tiempos las empresas de este
sector se han tenido que enfrentara aspectos legales que acaban con el vacío
normativo en el que han basado su despegue. Así, los gobiernos de distintos
países han intervenido para garantizar los derechos de los trabajadores de
estas plataformas, como fue el caso de Países Bajos con la empresa de reparto
de comida Deliveroo, o España, con el caso Glovo en 2020, y la denominada Ley
Rider, que garantiza los derechos de los repartidores. Desde el ámbito
comunitario se está trabajando igualmente en una directiva para mejorar las
condiciones de trabajo en plataformas digitales. El tiempo dirá si la cobertura
de unas condiciones de trabajo para los empleados no supondrá el fin de la
rentabilidad de este tipo de empresas, tradicionalmente basada en el todo vale.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">A las tendencias geoeconómicas,
sociales y políticas hay que sumar el efecto que está teniendo el desarrollo
tecnológico en el mercado de trabajo. De nuevo GlobalData nos ofrece una
panorámica en este sentido, cuando plantea un marco para el futuro del trabajo
caracterizado por los siguientes cinco componentes: visualización,
automatización, interpretación, colaboración y conectividad.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El primer elemento mencionado, la
visualización, hace referencia a que el trabajador digital deberá utilizar
gráficos e imágenes para presentar o transmitir la información, dado que se
verá obligado a manejar, analizar e interpretar grandes volúmenes de datos. De
esta forma, cobran cada vez más relevancia tecnologías como la realidad
aumentada y virtual, los gemelos digitales y las herramientas de visualización
de datos. Se trata de un camino que se espera que acabará por integrar los
puestos de trabajo en el metaverso.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Luego se menciona la
automatización como una forma de que las máquinas complementen el trabajo
humano, y que está relacionada con los robots industriales, los vehículos
autónomos, la impresión aditiva o los drones. Por otra parte, la interpretación
trata de la toma de decisiones en entornos muy complejos haciendo uso de
ingentes cantidades de datos, y aplicando tecnologías de inteligencia
artificial, especialmente, el aprendizaje automático. El ámbito de la colaboración
utiliza la tecnología para facilitar el trabajo en equipo y las relaciones con
los clientes, como las plataformas CRM, y, finalmente, la conectividad implica
usar redes para mejorar la comunicación y los procesos, con tecnologías como
las que dan soporte al internet industrial, el estándar 5G y el internet de las
cosas en general.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">GlobalData destaca también el
metaverso como tendencia a la que se dirige la evolución del puesto de trabajo,
dado que constituirá un entorno virtual de colaboración idóneo para el trabajo
en equipo. No obstante, reconoce que, aparte de pioneras como Accenture o Havas
que empiezan a generar experiencias al respecto, la gran parte de las empresas
está a la expectativa hasta ver cómo va evolucionando esta tecnología y qué
posibilidades reales ofrece.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Finalmente plantea como tendencia
el trabajo híbrido -combinar teletrabajo con trabajo presencial- como un modelo
que ha venido para quedarse tras la pandemia.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-67107253180932391002023-05-16T09:42:00.003+02:002023-05-16T09:42:58.948+02:00La programación al alcance de todos<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjXRB6cZ83LE8SZO3gR3FgOj0YamEUZK5dBrQlE0UGorIoUM82Fn2zQos75qGW75P8NoY5sNBrkWNijNa-ZxglyKYqwqxk9mT4xF06SxWsVWUrNGQ6_JtlhMufjjiVLoHml-WrCTrTeDjxZexX1XUpPYF8AKXXLJPAH8LFIEabrCt8_cZUM79hRaxnSaQ/s710/ScannedImage.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="710" data-original-width="623" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjXRB6cZ83LE8SZO3gR3FgOj0YamEUZK5dBrQlE0UGorIoUM82Fn2zQos75qGW75P8NoY5sNBrkWNijNa-ZxglyKYqwqxk9mT4xF06SxWsVWUrNGQ6_JtlhMufjjiVLoHml-WrCTrTeDjxZexX1XUpPYF8AKXXLJPAH8LFIEabrCt8_cZUM79hRaxnSaQ/s320/ScannedImage.jpg" width="281" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">A aquellos que estudiábamos en la
década de los ochenta del siglo pasado se nos repetía con insistencia que el
ordenador iba a ser una herramienta básica para cualquier ocupación que
fuésemos a desempeñar. Los más inquietos comenzaron a apuntarse a cursos de
programación de los lenguajes más en boga entonces -Fortram, Cobol, Basic…-, o,
cuando menos, a recibir formación para aprender a manejar el complejo <i>software</i> de
oficina que se utilizaba en la época, como los procesadores de textos WordStar
y WordPerfect o el gestor de bases de datos dBASE, que requerían el
conocimiento de numerosos comandos para su manejo con cierta agilidad. Sin
embargo, con el cambio de década la llegada de Windows de Microsoft trajo
consigo la revolución de la informática de usuario. Los entornos de trabajo
gráficos democratizaron el uso del ordenador, de forma que ya no hacía falta
saber nada para escribir un texto o crear una hoja de datos -por lo menos para
realizar las tareas más básicas-, pues todo se llevaba a cabo pinchando con el
ratón de forma intuitiva iconos y botones virtuales. El farragoso sistema
operativo MS-DOS, con su pantalla negra y sus líneas de comandos, quedó oculto
tras un agradable y colorista entorno de trabajo que permitía hacer lo mismo
-crear, borrar, mover archivos y carpetas- con sólo hacer clic.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Esto viene a cuento porque,
salvando las distancias, nos encontramos actualmente en una situación similar a
la que tuvo lugar en la primera década de los noventa. También hoy en día
recibimos el bombardeo recurrente de mensajes que nos instan a aprender a
programar como una condición necesaria para poder ocupar casi cualquier puesto
de trabajo. Y, también, en paralelo se está fraguando otra democratización de
la informática, otra forma de abrir sus posibilidades a todo el mundo sin la
necesidad de tener una formación técnica, que cobra forma a través dos
tendencias: el low-code y el no-code.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El primer caso, el low-code, se
refiere al desarrollo de <i>software</i> que requiere muy poca
programación. Se trata de plataformas donde podemos crear aplicaciones y
programas a partir de bloques de código prediseñados, aunque también podemos
añadir nuestras propias líneas de código sobre el generado de forma automática.
Aparte de simplificar y agilizar el proceso de gestación de un sistema
informático, reduce sobremanera el nivel de conocimientos técnicos que hay que
tener para hacerlo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El no-code va un paso más allá y
permite crear productos informáticos sin tener que escribir ni una línea de
código. Al igual que en el caso anterior, es una opción que se ofrece a través
de plataformas digitales en las que el usuario se enfrenta a una interfaz
visual en la que puede coger componentes de programación preconfigurados y
añadirlos a su objeto de desarrollo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Un buen ejemplo de esta filosofía
reduccionista es el popular CMS (<i>Content Management System</i>) WordPress,
una plataforma para la creación tanto de webs como de medios digitales. Su
versión más sencilla, basada en plantillas y módulos prefabricados, pone en
manos de cualquiera la posibilidad de crearse un sitio en internet. No
obstante, es una solución de código abierto que permite a aquellos con
conocimientos de programación ver el código fuente y modificarlo según sus
necesidades para personalizar la web creada.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Las plataformas low-code y
no-code presentan muchas ventajas, empezando porque permiten que cualquiera
pueda crear programas y aplicaciones sin necesidad de programar (o con un
mínimo de código), y este factor es una palanca relevante de cara a la
digitalización de las empresas. Además, permite generar desarrollos
informáticos de una forma más ágil y rápida, dado que escribir código es algo
lento y farragoso, especialmente para aquellos no muy familiarizados con esta
disciplina. Finalmente, el uso de este tipo de plataformas implica un ahorro de
costes para las organizaciones, ya que evitan mucha de la inversión que
conlleva la programación tradicional.<o:p></o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-59185135623880850572023-04-10T09:48:00.000+02:002023-04-10T09:48:03.281+02:00El futuro prometedor de los medios sintéticos<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhZHBSpu1_aCtfqG3bBnMs0gQ503lgxpjXEJjuLl9fRH0dg_9M-PesS5aIE2WWrCd0bvG6k8WOHfpXWVZ5XZKgAq84itJC3rOo7WeqPbktfavRlDv3Si9gA2a-sQDV14v4gMhEKV_Oe3KhhU69Z4whnNS9OTpQW5cF4CZ9-v4PnN1evTrVu9Bq6mIfNNA/s569/Deformado.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="569" data-original-width="525" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhZHBSpu1_aCtfqG3bBnMs0gQ503lgxpjXEJjuLl9fRH0dg_9M-PesS5aIE2WWrCd0bvG6k8WOHfpXWVZ5XZKgAq84itJC3rOo7WeqPbktfavRlDv3Si9gA2a-sQDV14v4gMhEKV_Oe3KhhU69Z4whnNS9OTpQW5cF4CZ9-v4PnN1evTrVu9Bq6mIfNNA/s320/Deformado.jpg" width="295" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Recientemente hemos podido ver a
Lola Flores, fallecida en 1995, protagonizando un anuncio de televisión de la
marca de cerveza Cruzcampo. La imagen de <i>la Faraona</i> se dirige
a nosotros desde la pantalla con frescura, con la voz y el acento con los que
la recordamos. Algo similar ocurre en la película de la saga <i>Star Wars
Rogue One</i>, cuando presenta a la princesa Leia tan joven como cuando se rodó
la primera entrega de la serie, en 1976, aunque la actriz Carrie Fisher que
daba vida al personaje tenía en ese momento -2016- sesenta años (de hecho,
murió en diciembre ese mismo año). Otro tanto ha ocurrido con el personaje de
Luke Skywalker interpretado por Mark Hamill, que en la serie de Disney <i>The
Mandalorian</i> estrenada en 2019, vuelve a aparecer tan joven como en la
primera trilogía de la década de los setenta. Se trata de tres ejemplos de lo
que se denomina medios sintéticos (<i>synthetic media</i>), la aplicación de
las tecnologías digitales para producir contenidos mediáticos artificialmente.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">A pesar de que una de las
aplicaciones más conocidas y alarmantes de los medios sintéticos es el <i>deep
fake</i> con fines delictivos -generalmente la creación de vídeos falsos
para desacreditar a personajes públicos-, su futuro se presenta muy prometedor
en numerosos campos como el periodismo, el marketing o la educación. No
obstante, se trata de un fenómeno que va mucho más allá.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Hablamos de medios sintéticos
para referirnos a cualquier formato de contenido digital creado o modificado
mediante algoritmos, especialmente a través de algoritmos de inteligencia
artificial. En concreto, incluye la síntesis de imagen, de audio y del habla,
así como la generación de música y del lenguaje natural. La verdadera
innovación consiste en que la creación de contenidos mediáticos pasa de ser
física a completamente digital. La tecnología está transformando la forma en
que nos comunicamos mediante nuevas formas de crear, consumir y contextualizar
el contenido.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Más allá de los usos delictivos y
peligrosos, los medios sintéticos abren la puerta a una verdadera era de
innovación en la generación de contenidos mediáticos. Si nos centramos en el
vídeo, la inteligencia artificial permite crear piezas de forma más rápida y
fácil que con la tecnología tradicional, y además por una fracción del coste de
producción. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El vídeo sintético puede, por
ejemplo, hacer más asimilable el contenido que en un texto resulta tedioso y
complejo, como, por ejemplo, las características de un producto financiero o de
un seguro. Se trata de utilizar las herramientas ofrece la inteligencia
artificial para personalizar el soporte del mensaje, de forma que un avatar
puede llamar al usuario por su nombre, utilizando un rostro o una voz que hagan
la comunicación más cercana. Las posibilidades que ofrecen estas tecnologías
son inimaginables. Por ejemplo, la compañía Vologram proporciona el convertir
cualquier vídeo convencional en una pieza de realidad virtual o realidad
aumentada. Otro caso interesante es el de la plataforma Replika, que permite al
usuario crearse un compañero virtual a través de la inteligencia artificial.
También los algoritmos inteligentes han hecho su entrada en las bellas artes,
como es el caso de los sistemas DALL-E 2 y Midjourney, que generan obras
gráficas a partir de descripciones de texto.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Empresas vanguardistas como
Synthesia, Tavus, Hour One, D-ID o Colossyan se dedican a la creación de vídeos
sintéticos bajo demanda -generalmente con fines comerciales-, sin la necesidad
de contar con actores y costosos equipos de rodaje, dado que están basados en
avatares generados con inteligencia artificial, y voces desarrolladas para la
ocasión.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La inteligencia artificial
también está llamada a revolucionar la atención al cliente, al utilizar bots
conversacionales cada vez más perfectos y realistas. Un ejemplo un tanto
pintoresco de esto es el que presenta el Museo Dalí de St. Petersburg, Florida,
en los Estados Unidos, basado en una experiencia de realidad virtual, bautizada
como <i>Dalí Lives</i>, gracias a la cual el público puede hablar con el
genial pintor catalán, que aparece representado como cuando tenía la edad de 50
años.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">A lo largo de esta década, los
medios sintéticos van a ir extendiéndose por todos los sectores y actividades,
adoptando formas y soluciones que hoy no podemos ni concebir. Se van a
convertir en la llave que abre un universo de posibilidades sin límites y van a
proyectar el uso de la inteligencia artificial mucho más allá que la esfera de
la comunicación. Urge que el desarrollo de esta tecnología vaya acompañado de
la creación de una normativa que regule los casos de uso, y de las herramientas
necesarias para poder identificar y denunciar su aplicación con fines
delictivos o dañinos.<o:p></o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-17024706624212633712023-03-21T09:29:00.000+01:002023-03-21T09:29:07.911+01:00El internet de las cosas ahora vigila el comportamiento humano<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi9MQAXzTXZT_g-IZQKbcmq6aAlgcCT0QlmEpXYDaiSUaGyzOMyGsUqjhvOUHItQRpXSaqZ_h6s3L6zOqKMpj6eJqttKaSlEroucSZfXcHcn0ek8nc-yrFoZlK8zGVmOet4Kl3nPJ5Klgj8worWOwpt0vdXy5bKv8PHmPNF6LKreXFYaH7Dhrhm2DOzzA/s501/mov1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="328" data-original-width="501" height="210" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi9MQAXzTXZT_g-IZQKbcmq6aAlgcCT0QlmEpXYDaiSUaGyzOMyGsUqjhvOUHItQRpXSaqZ_h6s3L6zOqKMpj6eJqttKaSlEroucSZfXcHcn0ek8nc-yrFoZlK8zGVmOet4Kl3nPJ5Klgj8worWOwpt0vdXy5bKv8PHmPNF6LKreXFYaH7Dhrhm2DOzzA/s320/mov1.jpg" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El internet del comportamiento
(IoB en sus siglas en inglés) es una aplicación del IoT que persigue
monitorizar la conducta de las personas con el fin de establecer patrones de
comportamiento. Se trata de una tecnología que puede revolucionar el
conocimiento que tienen las empresas de sus clientes y la personalización de
los productos y servicios.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El internet de las cosas (IoT) es
una de las tecnologías protagonistas de la revolución digital que estamos
viviendo. El término, que fue acuñado en el MIT por Kevin Ashton en 1999,
define la interconexión de objetos y dispositivos en las redes para que recojan
grandes cantidades de información que, una vez procesada y analizada,
manifiesta una utilidad concreta. Se trata de terminales como pueden ser
sensores, cámaras, termostatos, termómetros, altavoces inteligentes,
instrumental para medir la calidad del aire de una ciudad, y, en general,
cualquier aparato susceptible de recoger información.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El crecimiento del IoT es
imparable: Ericsson vaticina que en 2027 habrá globalmente 30 200 millones de
conexiones a internet, una cifra que supone un incremento del 106% sobre la
cantidad que había en 2021. Una de las principales aplicaciones del internet de
las cosas es la industria, el denominado en inglés <i>industrial internet
of things (IIoT</i>), que, en combinación con aspectos como la inteligencia
artificial, la robótica o el blockchain, está transformando completamente la
fábrica, tal y como la conocíamos. En este sentido, la consultora OMDIA calculó
que en el año 2030 habrá mundialmente alrededor de 4 400 millones de
dispositivos conectados en las plantas manufactureras, de las cuales más de la
mitad estarán localizados en Asia.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Hasta ahora, el internet de las
cosas se ha centrado en monitorizar y analizar sistemas, por ejemplo, el
tráfico en una ciudad, la seguridad de unas instalaciones o el funcionamiento
de una planta de producción, entre las innumerables aplicaciones que tiene esta
tecnología. Recientemente, se habla de aplicar esta filosofía a los humanos con
el fin de analizar nuestro comportamiento. Se trata de lo que se ha denominado<i> Internet
of Behaviour (IoB</i>) o internet del comportamiento.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El IoB utiliza <i>big data</i> para
monitorizar la forma en que el ser humano se relaciona con la tecnología,
analizándola, para, en su caso, modificarla. Se trata de una disciplina que
utiliza el internet de las cosas, pero, en última instancia, la información
recopilada está generada por humanos interactuando con tecnología, bien a
través de terminales como ordenadores, <i>smartphones, wearables</i>,
altavoces inteligentes o automóviles conectados, como por medio de la
navegación y de las acciones que llevamos a cabo en las redes. Esos macrodatos
son analizados desde la perspectiva de la psicología conductual con la
finalidad de establecer patrones de comportamiento. Evidentemente, una de las
primeras aplicaciones del internet de comportamiento que nos viene a la cabeza
es el marketing: supone una herramienta de primer orden para conocer qué mueve
al consumidor y al cliente potencial a tomar las decisiones que lleva a cabo, y
puede contribuir a modificar sus hábitos de compra en beneficio de un
determinado producto o servicio.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En octubre de 2019, la consultora
Gartner predijo que para 2023 el 40% de las personas del mundo estarían
monitorizadas a través de IoB, con el fin de mejorar la prestación de los
servicios y optimizar el beneficio de las empresas. También reconoce este
informe que a largo plazo todo el mundo, en mayor o menor medida, estará
expuesto a alguna forma de internet del comportamiento, pues será algo que
estará perfectamente contemplado en la legislación vigente y estará integrado
en la cultura social del momento.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En principio, el principal riesgo
que presenta el IoB es que una brecha de seguridad ponga los datos y la
información de las personas en manos criminales. Es por ello, que garantizar la
inquebrantabilidad de los servicios, los sistemas y las aplicaciones que se
nutren de <i>big data</i> sobre el comportamiento debe constituir una
prioridad. Otro tema relevante es exigir transparencia en el tipo de datos que
recogen las organizaciones que llevan a cabo IoB, y el uso que hacen de ellos,
especialmente, cuando se trata de aplicaciones que no requieren la autorización
del usuario. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Pero, sin duda, el mayor peligro
es la posibilidad de que las acciones basadas en el internet del comportamiento
resulten excesivamente intrusivas por el usuario. Hace años, la empresa
estadounidense Target podía elaborar un “índice de predicción de embarazo” en
función de la combinación de productos que adquirían sus clientas. Las
estadísticas de ventas de la compañía establecían que las mujeres embarazadas
eran más proclives a comprar 25 productos concretos. En concreto, podían
establecer con bastante fiabilidad hasta la fase del embarazo en la que se
encontraba cada mujer. En base a esta información, la empresa mandaba a estas
clientas cupones de descuento en productos en función de su estado. Un día, la
sucursal de Target de Minneapolis recibió la visita de un padre enfurecido
porque le habían enviado a su hija adolescente cupones de descuento para ropa
de bebé y cunas, y este acusaba a la compañía de animar a su hija a quedarse
embarazada. El dependiente pidió perdón en nombre de la organización, ignorante
de qué iba aquello, y días después llamó por teléfono al airado progenitor para
reiterar sus excusas, y, cuál no sería su sorpresa, cuando el padre le dijo
que, tras hablar con su hija, esta le había confesado que, efectivamente,
estaba en estado. La empresa lo había sabido antes que la propia familia.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-16302765141130502642023-03-08T13:37:00.002+01:002023-03-08T13:37:31.758+01:00Las ciudades espejo construidas con datos<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhJQvcXCr4ul1_Tul1swnmNXsrKPmgEIQ8YWiQq7xmKBuf3Koknyr_EqNgzhL7QjbkUGiPi9kwBoxB8cGSytdWlwSbMMGNBIhIOa9iZ3u519Xb33Qg65RsxgVBfm2lBjwcp8AIvec1U1ZaCgC_t6ofg-ylzT7OVO-CEK0p5Gatg2ItjBD-lV5I5H4e-bw/s569/Deformado.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="569" data-original-width="525" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhJQvcXCr4ul1_Tul1swnmNXsrKPmgEIQ8YWiQq7xmKBuf3Koknyr_EqNgzhL7QjbkUGiPi9kwBoxB8cGSytdWlwSbMMGNBIhIOa9iZ3u519Xb33Qg65RsxgVBfm2lBjwcp8AIvec1U1ZaCgC_t6ofg-ylzT7OVO-CEK0p5Gatg2ItjBD-lV5I5H4e-bw/s320/Deformado.jpg" width="295" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">“Los antiguos construyeron
Valdrada a orillas de un lago con casas todas de galerías una sobre otra y
calles altas que asoman al agua parapetos de balaustres. De modo que al llegar
el viajero ve dos ciudades: una directa sobre el lago y una de reflejo,
invertida. No existe o sucede algo en una Valdrada que la otra Valdrada no
repita, porque la ciudad fue construida de manera que cada uno de sus puntos se
reflejara en su espejo, y la Valdrada del agua, abajo, contiene no solo todas
las canaladuras y relieves de las fachadas que se elevan sobre el lago, sino
también el interior de las habitaciones con sus cielos rasos y sus pavimentos,
las perspectivas de sus corredores, los espejos de sus armarios.”<br />
</span></i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Italo
Calvino. <i>Las ciudades invisibles</i><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El concepto de gemelo digital ya
está muy extendido en el ámbito de la industria. Consiste básicamente en
construir una réplica virtual de un sistema – por ejemplo, una máquina, un
motor, una línea de producción- y alimentarla con datos en tiempo real, recogidos
del elemento físico original. Una posible aplicación podría ser el prototipo de
un automóvil, donde el gemelo digital debe reproducir cada parte del vehículo
en 3D y replicar el mundo físico en el que circula de una forma tan precisa que
un conductor de la réplica virtual reciba las mismas respuestas que si pilotase
el modelo real. La utilidad de esta tecnología es innegable en aspectos como el
mantenimiento predictivo, pues con el modelo virtual podemos simular de manera
fiel las situaciones y condiciones a las que se puede ver sometido un elemento,
y estudiar su reacción, sin comprometer la seguridad ni el buen funcionamiento
de este.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Sin embargo, los gemelos
digitales no se limitan al ámbito de la producción manufacturera y la
ingeniería industrial, y han llegado incluso al terreno de la planificación y
la gestión urbanas. Hoy en día hablamos de ciudades gemelas digitales para
referirnos a modelos que simulan algunos de los procesos que tienen lugar en un
núcleo de población, elaborados en base a la información real que este genera.
Se trata de una filosofía estrechamente relacionada con la <i>smart city</i>,
la inteligencia del dato aplicada a la gestión urbana. Uno de los paradigmas en
este campo es el proyecto Virtual Singapore, que persigue la creación de un
modelo tridimensional dinámico y colaborativo de dicha ciudad.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El modelo de la ciudad estado
asiática es uno de los pioneros en este campo, puesto que comenzó a erigirse en
2014. Está compuesto por más de tres millones de imágenes tomadas de las calles,
además de 160 000 más capturadas desde el aire, y miles de millones de puntos
de recogida de datos. Todo ello configura un mapa en tres dimensiones que
supone más de 100 terabits de información.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El proyecto de Singapur tiene
como objetivo promover el desarrollo sostenible de la isla. A modo de ejemplo,
un reciente experimento con el modelo buscaba calcular la cantidad de energía
solar podría recoger la ciudad en función de la disposición de sus edificios
verticales y el estudio del nivel de insolación que recibe cada tejado y cada
fachada. Igualmente, dentro de la meta de bajar la temperatura media del núcleo
urbano, el modelo sirve para estudiar cómo cada nueva construcción puede
afectar a las rachas de viento y las sombras sobre la superficie.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Las ciudades gemelas digitales
tienen su origen en el concepto de los modelos espejo formulado por el profesor
de la Universidad de Michigan Michael Grieves en 2006: erigir modelos digitales
en el espacio virtual, que interactúan con entidades físicas, y que describen
el ciclo de vida de estas. En 2017, en el seno de la CAICT, la Academia China
de la Tecnología de la Información y las Comunicaciones, esta técnica se
concibe aplicada por primera vez para la planificación y construcción de las
ciudades inteligentes, mediante el diseño de un modelo holográfico que recree
virtualmente la urbe de forma que pueda ser analizada en tiempo real,
convirtiéndose así en una herramienta de gestión urbana.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Estos modelos virtuales urbanos
parten de una red ubicua de recogida de información -mediante el internet de
las cosas-, que suministra datos en tiempo real y de forma continua sobre temas
como el tráfico, los parámetros medioambientales o las operaciones urbanas, y
los sitúa en un mapa virtual. El ejercicio cartográfico permite analizar los
problemas de la ciudad, identificando patrones de funcionamiento gracias a los
algoritmos de gestión de <i>big data</i>, y ofrecer conclusiones y
recomendaciones de apoyo a la toma de decisiones de las autoridades. La
recreación virtual, en suma, presenta una panorámica completa del ciclo de vida
de los servicios de la ciudad física, abriendo la puerta a la optimización de
su funcionamiento y a promover un desarrollo económico sostenible.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Los gemelos digitales urbanos
redundan en la mejora de las condiciones de vida de los ciudadanos, y también
en el ahorro de costes de las políticas públicas. El Foro Económico Mundial
calcula que en 2030 esta tecnología supondrá ahorros de hasta 280 000 millones
de dólares en las inversiones y gastos asociados a la planificación urbana.<o:p></o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-54935352321472564872023-02-21T09:37:00.001+01:002023-02-21T09:37:37.740+01:00El pueblo inteligente como solución a la despoblación<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbULqG-U5s4okFBKJK_ahm68PTmfqrUTVtdU61cilusy6Uvvj4LxoXQJvm3gC7vC9uk_oF_EkNxqFL9ov21zjW4BfOD_L6kFPQNSmruUzqkrVwtM7b2RjEYiIuxJmDasr8oFS0FkOBjidJTk54LxSRyPC3cx115QJmyMKOFP7FGsVPkQInayyGc2Pxog/s2048/DSC_1481.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1362" data-original-width="2048" height="213" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbULqG-U5s4okFBKJK_ahm68PTmfqrUTVtdU61cilusy6Uvvj4LxoXQJvm3gC7vC9uk_oF_EkNxqFL9ov21zjW4BfOD_L6kFPQNSmruUzqkrVwtM7b2RjEYiIuxJmDasr8oFS0FkOBjidJTk54LxSRyPC3cx115QJmyMKOFP7FGsVPkQInayyGc2Pxog/s320/DSC_1481.JPG" width="320" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Uno de los grandes problemas que
enfrenta España es la falta de articulación del territorio. La población se
concentra en núcleos urbanos de gran tamaño muy densamente poblados, y, en
general, no abundan los enclaves de tamaño mediano que contribuyan a
distribuirla a lo largo y ancho del del mapa, como ocurre en otras naciones europeas.
A modo de ejemplo, en nuestro país existen treinta ciudades de más de 200 000
habitantes, seis de las cuales superan el medio millón. En cambio, Francia –con
un 40% más de población- tan solo cuenta con once ciudades de más de 200 000
habitantes, y solamente Lyon, Marsella y París pasan del medio millón. Por su
parte, Italia, con casi un tercio más de población, tiene dieciséis núcleos
urbanos de más de 200 000, mientras que Reino Unido, con 67 millones de
habitantes, presenta veintidós.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El proceso de despoblación del
medio rural viene de muy atrás, aunque se ha acelerado sobremanera en los
últimos treinta años, en parte (aunque no solo), por la revolución que han
conocido las infraestructuras de comunicaciones del país. Paradójicamente, el
haber conectado con vías rápidas los distintos puntos de nuestra geografía,
tanto férreas como carreteras, ha contribuido a aislar grandes zonas del
interior de la península. Por una parte, los grandes trazados del tren de alta
velocidad y la red de autopistas han convertido las rutas en <i>no lugares</i>,
siguiendo la terminología del antropólogo francés Marc Augé (<i>Los «no
lugares». Espacios del anonimato. Una antropología de la Sobremodernidad</i>,
1992). <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Las carreteras de antes
atravesaban las localidades y establecían una conexión entre el viajero y el
espacio que recorría; ahora, <i>“el paisaje toma sus distancias, y sus
detalles arquitectónicos o naturales son la ocasión para un texto, a veces
adornado con un dibujo esquemático”</i>. Los ferrocarriles, incluso los de
largo recorrido, antiguamente paraban en los pueblos, <i>“las vías férreas
penetraban en la intimidad de la vida cotidiana”</i> de los lugares que
atravesaban; hoy, los trenes pasan sin parar a tanta velocidad que apenas
podemos leer el nombre de las estaciones que dejamos atrás. Las vías de
comunicaciones ultrarrápidas han condenado al aislamiento a amplias zonas de
nuestra geografía, que se han visto excluidas de las rutas que antaño
vertebraban el territorio.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Por otro lado, los avances en las
últimas décadas del transporte por carretera han supuesto que los grandes
núcleos urbanos y las capitales de provincia han canibalizado una parte
importante de la actividad económica del mundo rural. Frente a las carreteras
de doble sentido de antes, autovías de varios carriles; frente al concepto del
coche familiar como un símbolo de estatus, la posibilidad actual de que todo el
mundo adquiera vehículos cada vez más rápidos y potentes. Todo ello ha llevado
a que el medio rural esté mejor conectado con las ciudades, lo que, lejos de
beneficiarle, ha condenado su actividad comercial. Antiguamente, recorrer
distancias de entre 50 y 100 kilómetros para pasar una tarde de compras o de
ocio era algo impensable por el tiempo que llevaba el desplazamiento. Hoy en
día se trata de algo que hace la gente que vive en los pueblos de forma
habitual, con el consiguiente efecto negativo sobre el comercio y la economía
locales.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Lo cierto es que el medio rural
se muere, con una población cada vez más escasa y envejecida, y sin una
economía sostenible más allá de las actividades del sector primario. Las
propuestas de revitalización pasan generalmente por fórmulas relacionadas con
el turismo rural y con la explotación de productos regionales, pero no siempre
resultan alternativas sólidas que generen empleo y oportunidades laborales
suficientes que puedan frenar la despoblación. Recientemente, y especialmente
después de la pandemia, se ha planteado la digitalización como palanca de
crecimiento para estas regiones. De hecho, se ha llegado a acuñar el
término <i>smart village</i> (pueblo inteligente) como espejo rural
de las <i>smart cities</i>. Sin embargo, cualquier solución en este
sentido debe tener en cuenta que la tecnología, por si sola, no resuelve nada,
no es un remedio universal, y siempre debe como parte de políticas más amplias
de desarrollo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En 2017, el documento <i>EU
Action for Smart Villages</i> incluía una definición de pueblo inteligente:<i> “son
zonas y comunidades rurales que aprovechan sus puntos fuertes y sus activos,
así como las nuevas oportunidades, para la creación de valor añadido, y donde
se refuerzan las redes tradicionales y nuevas por medio de la tecnología de
comunicación digital, de las innovaciones y la mejora de la utilización del
conocimiento en beneficio de los habitantes</i>”.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En este sentido, el debate que tuvo
lugar dentro del grupo de trabajo de la Red Europea de Desarrollo Rural (ENRD)
trabajó una mayor definición del término inteligente, como una forma de aportar
conocimiento sobre la transformación digital del medio rural. Una de las
principales conclusiones al respecto es que las tecnologías son un medio, y no
un fin, para dar respuesta a los problemas concreto que presenta cada
territorio. En este sentido, deben utilizarse solamente cuando resulten
apropiadas y necesarias.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Por otra parte, se destaca la
necesidad de que los propios actores locales tomen la iniciativa para
solucionar los problemas a los que se enfrenta su territorio, y que construyan
alianzas entre sí, es decir, entre las instituciones públicas, el sector
privado y el municipio. Asimismo, es necesario ampliar el marco de relaciones
más allá del municipio, y establecerlas con otros municipios rurales y con los
núcleos urbanos. Por último, hay que tener muy presente que no existe un modelo
estándar para todos los territorios, y que la transformación digital debe
adoptar una visión local, que aproveche los recursos propios y endógenos.<o:p></o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-9184902450469860922023-02-03T12:29:00.001+01:002023-02-03T12:29:44.515+01:00Del conocimiento al dataísmo: cuando abdicamos en la inteligencia artificial<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWSjuhs748Zo0iT0BGH2KNf5uj54t8JmU3DQXfkZd6BQmZGExoMd_DJinj0NA8WIdnMVcSiURm6V0Y0TJDPNB68eafDZXLBdQjVWk-EAOLrftqpwmuhdkqVophP75X0pXDZHHQYMkqFt1f4eLiE0347jR46eLygQfjyJKtpn2O8uQc-LNkTxwhk-bVWQ/s1227/Torner.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1227" data-original-width="1059" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgWSjuhs748Zo0iT0BGH2KNf5uj54t8JmU3DQXfkZd6BQmZGExoMd_DJinj0NA8WIdnMVcSiURm6V0Y0TJDPNB68eafDZXLBdQjVWk-EAOLrftqpwmuhdkqVophP75X0pXDZHHQYMkqFt1f4eLiE0347jR46eLygQfjyJKtpn2O8uQc-LNkTxwhk-bVWQ/s320/Torner.jpg" width="276" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Inteligencia artificial</span></i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"> ha sido
el término del año 2022 para la Real Academia de la Lengua. Tras vivir un largo
invierno en letargo, esta disciplina tecnológica ha vuelto a coger carrerilla
en la década pasada gracias especialmente a los avances en la capacidad para
recoger y procesar inmensas cantidades de datos, el denominado <i>big data</i>.
De hecho, la rama de la inteligencia artificial que realmente despunta es el
aprendizaje automático o <i>machine learning, </i>que consiste precisamente en
que los algoritmos aprenden de forma autónoma a base de consumir ingentes volúmenes
de datos. Para algunos expertos, como Gary Marcus, profesor de psicología y neurociencia
en la Universidad de Nueva York, esta dependencia de los macrodatos es un obstáculo
para poder llegar a la inteligencia artificial general, es decir, aquella que
funciona de forma similar al cerebro humano. Para otros, como Judea Pearl, el <i>machine
learning</i> solamente sabe establecer correlaciones para crear patrones, pero
no entiende el principio de causalidad, algo inherente a la inteligencia humana
(de hecho, publicó en 2018 un libro entero sobre la relación causa y efecto: <i>The
book of why</i> – <i>El libro del porqué</i>).<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El año pasado se puso de moda la
aplicación online ChatGPT, un sistema basado en el modelo de lenguaje por inteligencia
artificial GPT-3, que, a modo de oráculo moderno, mantiene conversaciones
eruditas con todo aquel que se acerca a preguntarle. Sin embargo, aparte de
estos ejemplos más o menos pintorescos, la inteligencia artificial ya está
entre nosotros, en aplicaciones tan prosaicas como en la función de texto
predictivo de nuestros teléfonos móviles o las recomendaciones personalizadas
de serie que nos ofrece Netflix.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Todos estos servicios y
aplicaciones son inmensos devoradores de datos, hasta el punto de que ya se
habla de la economía del dato, y se considera el dato un factor de producción
más dentro del proceso de creación de valor. A partir de ahora, todo comienza a
regirse por datos, y, para el filósofo coreano <a name="_Hlk126318966">Byung-Chul
Han</a>, el hombre <i>“abdica como productor del saber y entrega su soberanía a
los datos”.</i><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La de Han es una de las voces más
críticas que existen en la actualidad con los valores y el funcionamiento de
esta sociedad del siglo XXI, que hemos denominado digital. A su juicio, la
cultura de autosuperación y autoexigencia que guía al trabajador de esta época
ha sido una maniobra brillante de pensamiento neoliberal para conseguir que nos
explotemos a nosotros mismos. También critica la hiperconectividad e
hiperactividad que sufrimos en esta sociedad, y defiende las bondades del “no hacer
nada”, de la mera contemplación, y se muestra reacio a la digitalización,
porque considera que ha desmaterializado nuestras vidas alejándonos de la realidad
física, de manera que rompe una lanza por volver a poseer objetos físicos y por
realizar trabajos manuales, como una forma de volver a conectar con el mundo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En su libro <i>La desaparición de
los rituales</i> (2019) dedica un capítulo al fenómeno que ha bautizado como <i>dataísmo</i>.
El uso generalizado de <i>big data</i> ha desbancado al ser humano como
productor de saber, de forma que <i>“ahora el saber es producido maquinalmente”</i>.
La mente no puede trabajar con esas enormes cantidades de datos, pero los
procesadores informáticos sí, porque no intentan comprender, sino que se
limitan a calcular. La rapidez del trabajo algorítmico se basa en que las
máquinas no piensan, solamente realizan tareas aditivas con los datos. El
pensar requiere tiempo porque se basa en una narración y tiene un componente
lúdico, que es destruido por la presión para producir más rápido. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Byung-Chul Han concluye que el
paso al <i>dataísmo</i> es el paso de la narración a la mera enumeración. Y sentencia
que, aunque el pensar se asimila al cálculo, <i>“los pasos del pensar no son
fases del cálculo que prosigan con lo igual. Son más bien jugadas o pasos de
baile, que generan algo distinto, un orden completamente nuevo de cosas”.</i><o:p></o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-20595293707671355572023-01-23T12:09:00.001+01:002023-01-23T12:09:45.826+01:00Web3, un internet descentralizado sobre cadenas de bloques<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi_ZYwl2iWSVUV2hyTRwFSIa-H_3iqTicVrW1AiwN9VKnc660YOV-Z9Cgc20h5uO5TElLw4HVADWSIQQg7Jb5cC51xulqIxu0ua82O72D9t5pAofarb2Qfwbd79bAERz26Nq9aEg-ULxd8qqCZPnuUeNKCRey6_Z36TWSEiSIqE85DlVbFk4yox0awxag/s300/curiosidades.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="300" data-original-width="300" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi_ZYwl2iWSVUV2hyTRwFSIa-H_3iqTicVrW1AiwN9VKnc660YOV-Z9Cgc20h5uO5TElLw4HVADWSIQQg7Jb5cC51xulqIxu0ua82O72D9t5pAofarb2Qfwbd79bAERz26Nq9aEg-ULxd8qqCZPnuUeNKCRey6_Z36TWSEiSIqE85DlVbFk4yox0awxag/s1600/curiosidades.jpg" width="300" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La web del futuro próximo ya no
funcionará sobre plataformas digitales de servicios, sino sobre la tecnología
blockchain, una base que garantizará las relaciones directas sin intermediación
entre los usuarios de la red, y traerá condigo la llegada de un internet más
democrático, a juicio de los expertos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Sir Tim Berners-Lee inventó la
World Wide Web que hoy todos conocemos y usamos hacia 1989, mientras estaba
empleado en el CERN, la Organizacion Europea para la Investigacion Nuclear. Él
solamente buscaba una solución operativa a las limitaciones que encontraba el
intercambio de información entre las distintas áreas de su organización y, por
aquel entonces, no podía ni imaginar que su idea iba a diseñar la forma que ha
tenido internet en los últimos treinta años. La filosofía de la web parecía
destinada a cumplir la utopía de darle una voz a cada habitante del planeta
gracias a su estructura descentralizada y aparentemente democrática.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Un nuevo giro de guion ocurre entre
2008 y 2010, cuando comienza a hablarse de la web social o web 2.0, una evolución
de internet basada en los medios sociales, que convertía a los usuarios
en <i>prosumers</i>, es decir, consumidores y a la vez productores de
información y de contenidos digitales, pues la simplificación de las
herramientas -especialmente blogs y redes sociales- permitían que todo el mundo
pudiese publicar y crear sin conocimientos avanzados de ningún tipo. Sin
embargo, a la hora de la verdad, la experiencia de la web se ha acabado concentrando
a través de unas pocas empresas, que en su mayor parte trafican con los datos
personales de las personas exprimiéndolos en su beneficio y en el de sus
clientes.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En los últimos tiempos hablamos
de que la Web3 va a transformar el marco de relaciones de la red, eliminado el
papel de las plataformas, los servidores y la centralización de autorizaciones
en la gestión de la información que circula por internet y de los flujos de
valor que se generan entre los distintos agentes. Y vuelve el viejo anhelo de
navegar por un internet más libre y participativo, en el que todas las personas
tengan un protagonismo específico y en el que sus manifestaciones digitales no
constituyan materia prima para alimentar algoritmos para la manipulación
comercial o ideológica.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El padre de la criptomoneda Ether
Gavin Wood, acuñó el término Web3 en 2014, y resume su esencia en una frase
sintética: <i>“menor confianza, mayor verdad”. </i>Para él, la
confianza constituye básicamente fe, la creencia ciega de que el mundo va a
funcionar, pero sin una evidencia real o un argumento racional que lo
justifiquen. En sus propias palabras:<i> “la confianza implica que estás
depositando algún tipo de autoridad en</i> otra persona, o en alguna
organización, y ellos pueden hacer uso de esta autoridad de una forma arbitraria”.
Y concluye: <i>“queremos más verdad- a lo que realmente me refiero es a
una razón de más peso para creer que nuestras expectativas se cumplirán”</i>. Y
la tecnología de las cadenas de bloques aporta la verdad que demanda Wood.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El planteamiento de partida de la
Web3 es que los usuarios, a diferencia de lo que ocurre en la actualidad, son
los dueños de sus datos personales, tanto los que definen su identidad, como de
los que generan a través de las interacciones de las redes, y todos ellos
quedarán protegidos en <i>wallets</i> o monederos digitales
personales y anónimos. De esta forma, tanto nuestra información personal -de la
que ahora se benefician empresas como Facebook o Google-, como otros activos
digitales de nuestra propiedad, representados por <i>tokens</i>, están
registrados y protegidos en bloques de blockchain. Cualquier operación que
hagamos con los mismos quedará igualmente registrada y protegida por la cadena
de bloques de posibles alteraciones o manipulaciones. Estamos, por tanto, ante
el surgimiento de nuevos esquemas de relaciones sociales y de negocios en las
redes.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-718597958989125482023-01-16T10:09:00.003+01:002023-01-16T10:09:37.948+01:00Los riesgos de utilizar la inteligencia artificial en la sanidad<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhG1ffhne7GHMSRQIuiqksvsdDf2NXLTA8-Kmbu0LR97gMKX0waCwhq6POi1vvnk5rrR9-lDK9Y67D8cJE5Xn5rZPiQYf8PQsa-oMLY4z6oNrozl_YFfB6yxxXuCDGFfR0PKVNsK1ZUH8g0gkDiWQf-2HPc4qCnqtDneq7UqMcjZzQ1hgJCojwFK1v9Kg/s1518/Blog%20futuro.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1518" data-original-width="1158" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhG1ffhne7GHMSRQIuiqksvsdDf2NXLTA8-Kmbu0LR97gMKX0waCwhq6POi1vvnk5rrR9-lDK9Y67D8cJE5Xn5rZPiQYf8PQsa-oMLY4z6oNrozl_YFfB6yxxXuCDGFfR0PKVNsK1ZUH8g0gkDiWQf-2HPc4qCnqtDneq7UqMcjZzQ1hgJCojwFK1v9Kg/s320/Blog%20futuro.JPG" width="244" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El dato se ha convertido en el
combustible de la economía digital. El cuidado de la salud no es una excepción,
y la recolección, el análisis y el uso de datos sanitarios -desde los análisis
clínicos, hasta los historiales médicos- es la base de la práctica de la
medicina y de la investigación en este campo. La progresiva digitalización del
sector ha hecho que durante las últimas dos décadas haya aumentado
exponencialmente el tipo de datos utilizados por los servicios de salud,
incluyendo ahora información personal sobre los individuos procedente de
diversas fuentes a veces no directamente relacionadas con la salud, como, por
ejemplo, datos sobre el entorno del paciente, sobre su estilo de vida,
socioeconómicos o comportamentales.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Qué duda cabe que el potencial de
los macrodatos y la inteligencia artificial aplicados al cuidado sanitario es
inmenso, tanto en términos de la velocidad y precisión a la hora de realizar
diagnósticos, como en la mejora de la calidad del servicio prestado o el apoyo
a la toma de decisiones. Sin embargo, este uso de información personal puede
acarrear problemas éticos, que es necesario poder identificar y controlar
mediante una legislación adecuada, que proteja los derechos de la ciudadanía.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Uno de los principales riesgos
que conlleva la utilización de grandes colecciones de datos es la posibilidad
de vulnerar el derecho a la privacidad de los individuos. El compartir datos o
transferir datos personales cedidos por los pacientes -o generados dentro de un
proceso sanitario-, puede llevar a que la información recabada sea utilizada
para discriminar o para cometer injusticias, e incluso, si caen en malas manos,
pueden utilizarse para cometer actos delictivos. En este sentido, resulta
fundamental establecer protocolos y normas estrictas sobre quién puede acceder
a los datos personales y bajo qué circunstancias a lo largo de todo el ciclo de
vida de la inteligencia artificial.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La Organización Mundial de la
Salud (OMS) alerta del peligro adicional de que las instituciones encargadas de
prestar los servicios de salud recojan más datos de carácter personal que los
que requiere el algoritmo para funcionar, y que ese “superávit de datos”, sea
compartido con terceros, por ejemplo, agencias gubernamentales, para llevar a
cabo acciones que puedan vulnerar los derechos humanos, como pueden ser la
vigilancia y el control de la población, o la aplicación de castigos
individuales. La OMS pone de ejemplo de esto la aplicación para rastrear
contactos de COVID-19 que puso en marcha el Gobierno de Singapur, cuyos datos
podían ser accedidos en el marco de una investigación criminal.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Otro de los grandes problemas que
presenta el uso de <i>big data</i> en la inteligencia artificial es
la posible aparición de sesgos no deseados en los resultados que ofrecen los
algoritmos, algo que puede originarse por la mala calidad de la información
utilizada. Un estudio llevado a cabo por Marzyeh Ghassemi en el MIT ha
descubierto que los datos utilizados en medicina siempre llevan algún tipo de
sesgo de sexo, género o raza, tanto los que proceden de dispositivos clínicos,
los asociados a las intervenciones, como los que tienen su origen en las
interacciones entre pacientes y personal sanitario. Al alimentar con estos
datos el <i>machine learning</i>, las conclusiones a las que llegan los
algoritmos reproducen esos sesgos. En la práctica el estudio ha desvelado que
los modelos de inteligencia artificial sanitarios analizados funcionan de forma
diferente en función del tipo de paciente, y ofrecen resultados sesgados en
función del género y la raza.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Resulta primordial que un
algoritmo relacionado con el cuidado de la salud resulte lo suficientemente
comprensible, transparente y explicable para el personal sanitario que debe
trabajar con él, que son aquellos que deben estar al tanto de los datos y
variables que ha utilizado el sistema para elaborar su resultado. El problema
es que a menudo un sistema de <i>machine learning</i> puede ser
difícil de comprender por sus usuarios, y difícil de explicar por los técnicos
que lo han creado. En este sentido, según apunta un informe de DigitalES, se ha
comprobado que el personal sanitario prefiere sacrificar un poco de precisión
con tal de que el sistema sea más entendible.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Por otro lado, la inteligencia
artificial debe ser robusta, es decir, tiene que tener una solidez técnica y
haber sido desarrollada con un enfoque preventivo de riesgos, de forma que se
comporte siempre como se espera que lo haga, minimizando los daños
involuntarios e imprevistos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Y, en última instancia, en la
aplicación de algoritmos inteligentes en la prestación sanitaria siempre debe
regir la supervisión humana.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1857068982762282028.post-48524414307969092552022-12-21T09:53:00.000+01:002022-12-21T09:53:08.227+01:00Más que aprender a programar, pensamiento computacional<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTjMaopp6imx5OmQ7vToMHikVZXLt6UxwEr0-AarwcXzfRAWz_9x5OseMbsF9oryICmNfYvsdofERgoxGG0edr9xwi-m-X5Xs_CqOMdCvmNKa8-Z_riaDOohFMi_j1JJ3bxhpttvSqVF0VJldvmCNqvpksVdgbe5d-NyowXRs8T-AhAPUvjFcL5pCADA/s1227/Cobo.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1227" data-original-width="1060" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTjMaopp6imx5OmQ7vToMHikVZXLt6UxwEr0-AarwcXzfRAWz_9x5OseMbsF9oryICmNfYvsdofERgoxGG0edr9xwi-m-X5Xs_CqOMdCvmNKa8-Z_riaDOohFMi_j1JJ3bxhpttvSqVF0VJldvmCNqvpksVdgbe5d-NyowXRs8T-AhAPUvjFcL5pCADA/s320/Cobo.jpg" width="276" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Una sociedad digital demanda
competencias digitales en la población. El uso intensivo de tecnología en todos
los ámbitos de la vida cotidiana requiere de la ciudadanía la habilidad para
establecer un marco de relaciones con las máquinas que permita sacar un
rendimiento óptimo de ellas. Es por ello por lo que una de las mayores
preocupaciones institucionales actuales en relación con la transformación en la
que nos vemos inmersos está relacionada con la capacitación, con el desarrollo
de habilidades digitales para poder aprovechar los beneficios de un mundo
conectado a las redes.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Este es un aspecto relevante en
cualquier ámbito de nuestras vidas, desde realizar una gestión financiera al
cumplimiento de las obligaciones fiscales, o solicitar una cita médica, pues
cada vez se van convirtiendo más en actividades virtuales que no requieren una
presencia física, pero que implican unos mínimos conocimientos de navegación y
operativa a través de internet, que, por desgracia, una parte de la población
española todavía no posee. No obstante, es en el terreno laboral donde la
capacitación digital se convierte en un factor crítico, pues en un futuro a
medio plazo el trabajador humano tendrá que convivir con sistemas inteligentes
en prácticamente cualquier tipo de actividad.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En los últimos tiempos se ha
hecho mucho hincapié en la necesidad de que la programación informática se
convierta en una disciplina curricular desde los niveles educativos más
básicos, con el fin de preparar a los alumnos para poder vivir, y, sobre todo,
para poder trabajar, en un mundo en el que la tecnología está omnipresente. No cabe
duda de que aprender lenguajes de programación nos puede aportar un
conocimiento sobre la estructura lógica de funcionamiento de un sistema
informático, sin embargo, el enseñar a programar sin más puede resultar
limitado e incluso insuficiente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Por una parte, la vertiginosa
evolución de la innovación digital tenderá a convertir en obsoletos con
relativa rapidez los lenguajes de programación aprendidos durante la infancia,
obligando a las personas a asimilar otros nuevos a lo largo de la vida. Por
otra parte, las interfaces de las máquinas que nos permiten interactuar con
ellas son cada vez más cercanas a la forma de comunicación humana, y el manejo
de los programas y de los dispositivos se vuelve progresivamente más intuitivo,
lo que implica que para tareas no muy especializadas la programación puede
acabar por no resultar necesaria. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Hoy en día podría ocurrir algo
similar a lo que sucedió en los albores de la informática de consumo. Durante
la década de los ochenta, se hizo mucho énfasis en la necesidad de aprender a
programar, porque los ordenadores personales iban a invadir todos los ámbitos
laborales, como efectivamente sucedió en la década siguiente. Pero, a la vez
que proliferaban los PC, surgieron los entornos de trabajo gráficos, primero en
los equipos Apple y poco después a través de la difusión del entorno Windows de
Microsoft, de forma que para manejar aplicaciones informáticas estándar ya no
hacía falta picar complicadas líneas de comandos, sino únicamente pinchar
elementos gráficos virtuales en la pantalla. Hoy en día los interfaces han dado
un salto adelante más permitiéndonos manejar los sistemas con el uso del habla.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Es por ello, que, aparte de la
enseñanza más específica sobre programación, cobra especial sentido una
aproximación mucho más amplia a la relación entre el ser humano y la máquina,
algo que se denomina pensamiento computacional.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El término “pensamiento computacional”
fue introducido por primera vez en 2006 por Jeannette M. Wing en un breve
artículo titulado <i>Computational Thinking</i>. Ella lo concibe como una
disciplina que implica <i>“resolver problemas, diseñar sistemas y
comprender el comportamiento humano, utilizando los conceptos que son
fundamentales para la informática”</i>. En suma, se trata de una filosofía para
plantear y resolver problemas utilizando la lógica por la que se rigen las
máquinas. La propia Wing amplió su definición en 2011 en este sentido:<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">“El pensamiento computacional son
los procesos mentales implicados en la formulación de problemas y de sus
soluciones, de forma que las soluciones son representadas de tal manera que
puedan ser llevadas a cabo con efectividad por un agente procesador de información.”</span></i><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">De esta definición emergen dos
conceptos: que se trata de una forma de razonamiento que no depende
exclusivamente de la tecnología, y que es una metodología para la resolución de
problemas por humanos, por máquinas, o a través de la colaboración de ambos.
Básicamente, consiste en plantear un problema siguiendo el proceso operativo de
un sistema inteligente.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Por otro lado, Jeannette M. Wing
también llegó a subrayar en sus escritos qué es lo que no considera que es el
pensamiento computacional. En primer lugar, el pensamiento computacional se
basa en conceptualizar, no en programar: describe una forma de pensar con
diferentes niveles de abstracción, convirtiéndose en un proceso previo a la
programación. Se trata además de una habilidad fundamental del ser humano, que
no es rutina mecánica y repetitiva. Aunque menciona a los ordenadores, es una
forma de razonamiento específicamente humano de resolver problemas, no se trata
de una forma de pensar como computadoras, sino de hacerlo con ellas. El pensamiento
computacional complementa y se combina con el pensamiento matemático y con el
asociado a la ingeniería. Finalmente, se trata de una disciplina que produce
ideas y conceptos que usamos para resolver problemas, pero no está creado para
producir, artefactos o <i>software</i>.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El pensamiento computacional
puede ser considerada una competencia transversal del currículo educativo en la
medida en que apoya el desarrollo de la habilidad para trabajar con la
incertidumbre en situaciones complejas, y la necesidad de precisión en la
resolución de problemas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: "Georgia",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>Pablo Rodríguez Canfranchttp://www.blogger.com/profile/03161175447499311406noreply@blogger.com0